No pudo sumar de tres el conjunto de Dimas Carrasco en una nueva jornada de la UEFA Youth League disputada ante el Spartak en el Viejo Nervión. Los sevillistas, que no perdieron la cara en ningún momento del encuentro, suman un punto que sabe a poco viendo el trabajo realizado durante los 90 minutos.
En el primer acto, los equipos comenzaron estudiándose el uno al otro. Al cuarto de hora hubo un claro penalti claro sobre Lara que el colegiado Duje Strukan no señaló, y al minuto Ignatov adelantó a los rusos, que no estaban siendo ni mucho menos superiores sobre el tapete del campo principal de la ciudad deportiva. Pero los nervionenses siguieron peleando y, tras un aviso de Simo a la media hora, consiguieron no solo empatar, sino que también supieron darle la vuelta al marcador en los cinco últimos minutos antes de llegar al descanso. En el 41, Calderón hizo el gol del empate tras una buena jugada, y en el último minuto fue Viedma el encargado de dejar el marcador de cara para los intereses locales.
Tras el descanso todo estaba por decidir. Si bien es cierto que un nuevo gol de los de Dimas por mediación de Charaf parecía dar tranquilidad a los nervionenses, tres minutos más tarde Rudenko, una de las estrellas del conjunto moscovita, recortaba distancias. Ambos entrenadores iban moviendo piezas desde el banquillo, y el Sevilla FC lo seguía intentando, pero en un final tan loco como inesperado, Mazurov puso la igualada en el primer minuto de los siete que añadió el colegiado y no se pudo volver a remontar un choque que acaba con tanganas e imágenes poco habituales en el mundo del fútbol.