Tras nueve años sin clasificarse para Europa, pasando por un periodo verdaderamente convulso con dos descensos incluidos, el Sevilla FC aspiraba un domingo 23 de mayo de 2004, justo hoy se cumplen 14 años, a la consecución de un billete para la Copa de la UEFA, si bien para ello tenía que imponerse en un partido titánico a un Club Atlético Osasuna que, pese a no jugarse nada, había protagonizado intensos duelos con los andaluces en aquellos comienzos del siglo XXI.
El Sevilla FC venció a Osasuna en un partido feroz en la última jornada de la 03/04 y se metió en Europa, trasladándose la fiesta desde Nervión a la Puerta de Jerez
Son muchas las imágenes que se quedaron en la retina sevillista de aquel emocionante y abrupto choque. Para la historia quedará, por ejemplo, la inolvidable lucha de poder a poder entre la pareja de centrales sevillistas formada por Pablo Alfaro y Javi Navarro y los fornidos atacantes rojillos Chengue Morales, Aloisi, Webo y Bayakoko. El Sevilla FC, dirigido por Joaquín Caparrós, jugó un encuentro a corazón abierto, que acabó resolviéndose por una asociación de Daniel Alves y Julio Baptista, que el atacante brasileño resolvió con pericia con un derechazo cruzado que superó a Elía.
Aquel triunfo del Sevilla FC supuso, a la postre mucho más de lo que ya de por sí significó en aquel momento. Miles de sevillistas se desplazaron a la Puerta de Jerez, a donde acudió también el equipo para celebrar en la fuente la novena clasificación europea para el club de Nervión.