Se sigue haciendo largo el final de temporada para el Sevilla FC, que cayó este sábado en Vigo en un partido en el que volvió a encajar en la primera acción de ataque de su rival. Sin embargo, unas claras manos de Marcos Alonso permitían la igualada de Gudelj de penalti y la opción de disputar toda la segunda parte con un hombre más. Algo que, por desgracia, no tuvo influencia en un partido que el Celta supo llevar a su terreno también con diez. Mingueza devolvió la ventaja a los celestes y solo en el alargue reaccionaron los de Caparrós con claras ocasiones de Kike Salas y Ramón. Pero el que hizo el tercero en el añadido fue Borja Iglesias. Para hacerlo todavía más doloroso, Kike Salas ajustaba de nuevo el marcador pero ya con el alargue rebasado.
Se asomó en el inicio el Sevilla por los dominios de Guaita. De hecho tuvo la primera clara, en un robo en campo contrario de Lukebakio que aprovechó Pedrosa para pegarle al primer palo, donde tapó el meta celeste a córner. En la continuación de la jugada, Ramón la tuvo de cabeza pero Guaita volvió a aparecer para despejar. En la réplica, no mucho después, Moriba avisó con un tiro cruzado que pudo despejar Nyland. Sin embargo, nada pudo hacer el noruego dos minutos después, en un balón por dentro de Swedberg para el centrocampista, que se revolvió ante la llegada de Kike Salas y la puso rasa, imposible para el meta. Se ponían mal las cosas para un Sevilla que además perdería a Badé, sustituido por un problema en el ojo tras un choque con Hugo Álvarez.
El tanto de Kike Salas, que volvía a ajustarlo todo, llegó demasiado tarde
Moría la primera parte y en un balón para Peque dentro del área, el catalán la pica para levantarla y Marcos Alonso corta claramente con la mano. Penalti indiscutible que acaba en el VAR, pero para dirimir si la amarilla al lateral era demasiado poco. Finalmente, roja directa y responsabilidad para Gudelj, que no falló desde los once metros para cerrar con el empate un larguísimo descuento. En otras circunstancias se podría hablar de una segunda parte en ventaja para el equipo sevillista, pero las dinámicas de uno y otro pesaron mucho más que la condición numérica tras el descanso. El Celta llevó la iniciativa en la reanudación y tras un cuarto de hora sin demasiados acercamientos, a la primera clara que tuvo volvió a ponerse por delante.
Pérdida de balón en la banda izquierda que acaba en un centro de Fran Beltrán al segundo palo. Allí remata sin ángulo y mordida Mingueza, pero para dentro. Ahí se acabó la resistencia de un Sevilla que no se levantaría en el partido hasta el descuento, cuando sí tuvo dos cabezazos de Kike Salas y Ramón para que Guaita salvase a los suyos. Y cuando todo estaba casi imposible, mazazo definitivo con el tercero, de Borja Iglesias, tras un pase atrás demasiado corto de Gudelj a Nyland. Con el tiempo rebasado, Kike acortaba distancias sin tiempo ya para milagros. A falta de tres jornadas y a la espera de lo que haga el Leganés este domingo en feudo ante el Espanyol, el martes aguarda en Nervión una auténtica final por la permanencia ante la UD Las Palmas. Un partido que se perderá Isaac Romero por acumulación de amonestaciones.