Por más que se diga que en un derbi sevillano no hay favoritos, la realidad sigue demostrando que el Sevilla FC difícilmente irá con todo perdido a casa del eterno rival. Aunque el punto, por la necesidad del equipo y el guion del partido, sepan realmente a poco, los de Sampaoli se demostraron esta noche a sí mismos que la situación no es ni mucho menos irreversible y que hay tiempo para darle la vuelta. Eso es lo que a punto estuvo de hacer pero al marcador del Villamarín, después de encajar al borde del descanso un tanto rocambolesco -despeje de Gudelj que rebota en Navas- cuando Montiel ya había visto la roja. Pero en lo que va del descuento del primer tiempo al minuto tres de la reanudación, Fekir y Borja Iglesias dejaron a su equipo con nueve y el Sevilla tomó el mando. Gudelj se sacó la espinita -y de qué forma- con un golazo que puso las tablas, e incluso tuvo dos más para mandar todo el botín para Nervión. Al final, punto que no deja contento a nadie, pero menos si cabe a un Sevilla que lo rozó con los dedos.
Inicio habitual de los derbis, con mucha intensidad y la intención de no cometer un error que pudiera desequilibrar la balanza demasiado pronto. Así, hubo que esperar hasta el minuto 6 para el primer acercamiento bético, un disparo lejano de Guido que embolsó bien Bono. El Sevilla quería balón para atacar de forma ordenada, siendo el rival el que optaba por un fútbol de más ruptura buscando algún hueco por el que colarse. Esos acercamientos de los de Sampaoli no conseguían fraguar en un último pase y remate, mientras que un mal despeje de Mir al poste de su propia meta sí que pudo acabar en el primer gol del partido. La gran ocasión sevillista del primer tiempo fue para Rafa Mir, que aprovechó un regalo de Sabaly hacia atrás para sortear a Bravo y lanzar a portería vacía, pero sin la potencia suficiente como para evitar el despeje a córner de Edgar bajo los palos.
Los verdiblancos seguían buscando espacios y así se generó la acción de la roja directa a Montiel, que intentó rebañar ante la galopada de Álex Moreno sin opción de tocar el balón. Complicaciones para Jorge Sampaoli, que tuvo que renunciar al recurso de Rafa Mir arriba para reforzar el costado con Jesús Navas. El canterano iba a ser protagonista involuntario minutos después en la acción del 1-0. Despeje potente de Gudelj tras una recepción de Canales dentro del área, que rebota en el palaciego y coge la parábola suficiente como para esquivar a Bono y colarse en la portería en una acción inverosímil. Golpe muy duro y panorama casi imposible, que cambió con la segunda roja directa del partido. Jugada en banda entre Fekir y Papu Gómez, el francés frena para proteger la posesión, suelta el brazo e impacta en la frente del argentino, que tuvo que ser atendido por una pequeña hemorragia. Otra vez amarilla que el VAR convierte en roja y diez contra diez para la segunda parte. Justo antes del final del larguísimo descuento, Bono salvó con reflejos un mano a mano con Borja Iglesias.
La expulsión de Borja Iglesias le dio la manija a un Sevilla que acabó mereciendo la remontada
Permuta en el flanco izquierdo al inicio del segundo tiempo, con Telles entrando por Acuña. Pero la reanudación comenzó con susto y una nueva gran intervención de Bono, mano a mano con Álex Moreno. Pero en un nuevo giro de guion y después de solo tres minutos, un pisotón en el tobillo muy claro de Iglesias sobre Jordán supone -otra vez a instancias del VAR- la segunda expulsión en los verdiblancos. Ahí se acabó el Betis, aunque lo que acabaría en aluvión sevillista hasta el pitido final, fue de forma paulatina. De hecho Sampaoli mantuvo los tres centrales hasta que optó por la entrada de Dolberg -antes lo había hecho En-Nesyri- para aprovechar las continuas entradas de Navas por la derecha. Sin embargo, tuvo que ser el nuevo especialista desde lejos, Nemanja Gudelj, el que pusiera el silencio en el Villamarín con un zambombazo desde 30 metros, reeditando lo de Mallorca y poniendo la igualada en el marcador. Para entonces el Betis ya lo apostaba todo al punto y el Sevilla siguió explotando la vía de Gudelj, que tuvo una al larguero a uno para el 90 y otra que tapó a una mano Bravo en el último minuto de alargue.
El punto no saca al Sevilla de la mala situación pero sí de los puestos de descenso, a la espera de cerrar, en lo que a LaLiga se refiere, este primer tramo de competición el miércoles en casa ante la Real Sociedad. Buena oportunidad para reconfirmar el cambio de cara mostrado en Heliópolis y para marcharse a trabajar en el parón con la sonrisa que dejaría un cuatro de seis. Para ese encuentro no estará disponible Montiel, pero regresa el malagueño Isco Alarcón.
FICHA DEL ENCUENTRO
1. REAL BETIS: Bravo, Sabaly, Pezzella, Edgar, Álex Moreno, Guido Rodríguez, Carvalho (Guardado, min. 58), Canales (Willian José, min. 90+2), Ruibal (Luiz Henrique, min. 58), Fekir y Borja Iglesias.
1. SEVILLA FC: Bono, Montiel, Gudelj, Rekik, Acuña (Alex Telles, min. 46), Joan Jordán (Dolberg, min. 77), Rakitic, Óliver Torres (En-Nesyri, min. 50), Lamela, Papu Gómez y Rafa Mir (Jesús Navas, min. 42).
GOLES: 0-1, minuto 43: Jesús Navas p.p.; 1-1, minuto 82: Gudelj.
ÁRBITRO: José María Sánchez Martínez, del colegio murciano. Amarillas para Acuña, Lamela, Papu, Gudelj, Alex Telles, Jorge Sampaoli, Carvalho, Luiz Henrique y Álex Moreno. Rojas directas a Montiel (min. 37), Fekir (min. 45+3) y Borja Iglesias (min. 48).