Matinal de épica inesperada en el Ramón Sánchez-Pizjuán. El Sevilla FC sumó la tercer victoria liguera consecutiva en un partido de todos menos vistoso, en el que el Leganés tuvo fases de una mejor lectura del guión y que se resolvió con la oportuna aparición de Diego Carlos al rechace de un saque de esquina. Los de Aguirre se acabaron volcando en el área de Vaclík, uno de los grandes artífices del triunfo junto a una pareja de centrales de nuevo inexpugnable. Tras un descuento de polémicas y mucha tensión, el Sevilla se asienta como principal alternativa a los dos de arriba. De hecho, el Barcelona deberá esta noche cumplir en terreno del Atlético para recuperar el liderato y volver a estar por delante de los hispalenses.
Mañana algo fría en Nervión que comenzó también algo nublada en lo futbolístico. El plan de Aguirre era claro, con una línea de cinco atrás que daba poco margen al Sevilla para encontrar espacios. Así, los intentos por batir a Cuéllar en la primera parte fueron bastante atropellados. Apenas cinco minutos duró Siovas sobre el césped, obligado a marcharse sustituido tras un choque fortuito con Franco Vázquez. Para el primer intento de gol hubo que esperar al cuarto de hora, con un par de acciones de Nolito que no llegaron a buen puerto.
Un gol anulado a Franco Vázquez por fuera de juego puso cierre al primer tiempo
El Sevilla dominaba, llegaba por las bandas -sobre todo la iquierda- pero no llegaban remates limpios ante la poblada zaga madrileña. Quizás la más clara de todo el primer tiempo fue para De Jong, más incluso que la que le sacaron a Franco Vázquez bajo el larguero mediado el primer acto. El holandés lo intentó con un remate de tacón a centro de Navas que se le marchó demasiado cruzado a la derecha de la meta pepinera. A partir de ahí, los de Lopetegui fueron poco a poco entrando en el juego de poca fluidez que proponía el rival y que llegó a desesperar en cierto modo a la grada. A cuatro para el descanso se iba a cantar el gol, pero tras un rechace de Cuéllar a tiro de De Jong, Vázquez remachaba en fuera de juego sobre la línea.