Enzo Maresca es un hombre requerido por los medios desde su regreso a Sevilla. Por ello, este miércoles se organizó una rueda de prensa en la ciudad deportiva, en la que dejó claras sus sensaciones: "Es un placer estar aquí de nuevo. El Sevilla me ha dado mucho y le tengo mucho cariño al club y la ciudad, así que estoy muy contento y con ganas de que las cosas vayan bien".
El italiano dejó el club en 2009, fecha en la que ya se habían logrado éxitos, pero no al nivel actual: "Han pasado años desde que me fui y las cosas han cambiado en positivo. El club ha crecido mucho. Yo estaba aquí de vacaciones, porque estuve entrenando en Italia hasta noviembre. El club me preguntó si estaba dispuesto a colaborar con Vincenzo y acepté una vez que él dio su visto bueno. Es una experiencia que me está dando mucho".
"Estaba de vacaciones aquí y el club me preguntó si estaba dispuesto a colaborar con Montella"
Cuestionado por la opinión del míster, afirma que tiene la vista puesta en las tres competiciones: "Siempre hay situaciones nuevas, más si cambias de país. Él llega con toda la ilusión y tiene ya mucha experiencia como entrenador. Está ilusionado por jugar una final y una eliminatoria de Champions, pero también por LaLiga para recuperarnos de la situación actual".
Además, explicó su situación y sus labores principales: "Yo la temporada que viene sí podría sentarme en el banquillo. En Italia, con mi carnet de entrenador podía entrenar en Segunda y aquí se necesita un examen más, que lo tendremos ya la temporada que viene. Aún así el segundo entrenador es Daniele Russo. Ahora mismo él también ve los partidos conmigo porque tiene el mismo carnet de entrenador que yo. Mi labor principal es ayudar en los entrenamientos y en los primeros días también con el idioma. Puedo aportar mi conocimiento de LaLiga y sus equipos, porque aunque llevo años lejos de aquí, mi idea siempre fue entrenar y no he perdido el contacto".