LA IA OTORGABA AL SEVILLA FC UN 1% DE OPCIONES DE GANAR LA UEL ANTES DE ENFRENTARSE AL PSV

La inteligencia artificial está hoy presente en casi todos los órdenes de la vida. Los datos facilitan el día a día de las personas gracias a la tecnología. Y el deporte, una disciplina tan competitiva y económicamente tan potente, no queda al margen. El Sevilla FC, de hecho, tiene en el dato uno de los pilares fundamentales de su crecimiento tanto fuera como dentro de los terrenos de juego. Aun así, como siempre suele recordar el propio Monchi, los números nunca podrán desbancar del todo lo que aporta al fútbol el ojo humano. Esto, sumado a la enorme capacidad del Sevilla FC de superarse en su competición, la UEFA Europa League, arroja una sorprendente reflexión si se comparan los pronósticos de la IA con lo que acabó ocurriendo finalmente no solo en Budapest, sino durante todo el desarrollo de la competición continental desde el pasado mes de febrero.

FiveThirtyEight es una web norteamericana especializada en pronósticos y análisis político, económico y deportivo. Propiedad de The Walt Disney Company desde 2016, realiza desde hace años un seguimiento de probabilidad semanal sobre las opciones de los equipos que disputan las competiciones más importantes, como la UEFA Europa League. Llama la atención que, según estos pronósticos, el Sevilla FC nunca estuvo entre los favoritos para levantar el título, ni tan siquiera el día de la final. De hecho, tras el sorteo de la ronda de playoff, la primera que disputaron los nervionenses tras caer de la Liga de Campeones, las posibilidades de superar al PSV, según la IA, eran apenas del 36%. Mucho menores, casi inexistentes, eran las opciones, entonces, de ganar en Budapest. Solo se le atribuía un 1% de ellas, siendo el 18º favorito de los 24 clubes en liza. Apoyado en la cierta mejoría en LaLiga y en la Copa del Rey, la gráfica subió ya en los días previos a la ida ante los neerlandeses, pero la eliminatoria seguía 64-36 en favor del PSV y el Sevilla FC seguía siendo solo el 17º favorito de 24.

La eliminatoria ante el United estaba 73-27 en probabilidad para los ingleses antes de la ida en Old Trafford

Tras tumbar esa predicción, el equipo se plantó en octavos de final ante el Fenerbahçe y los turcos también eran los favoritos para la inteligencia artificial. De hecho, justo antes de disputarse los primeros 90 minutos de aquel cruce, los turcos estaban por delante con un 53% de las opciones. Eliminatoria, a priori pues, bastante igualada, aunque eso no aumentó la predicción de un Sevilla FC campeón en Hungría meses más tarde. Es más, de los 16 contendientes, el equipo de Nervión seguía considerado como el 13º favorito, con apenas un 3% de posibilidades de imponerse al resto. Nada que no esté al alcance del equipo que nunca se rinde, que se plantó en los cuartos de final para afrontar el más difícil todavía. El Manchester United, tras eliminar al Real Betis y conocer su rival de cuartos, el gran favorito en Budapest para la IA, con hasta un 23% de probabilidad. En la eliminatoria directa se daba casi por hecha su clasificación, con un 73% de opciones de pasar, por apenas 27 de los de Mendilibar. Casi ni se planteaba que el Sevilla FC pudiera, entonces, ganar el título, pues con solo ocho supervivientes, tenía el 4% de las chances, solo por delante del sorprendente Union Saint-Gilloise belga.

Pero la realidad sevillista volvía a imponerse a cualquier estadística y el rey de la competición estaba ya en semifinales. La Juventus parecía, esta vez sí, un escollo insalvable, lo que motivó que los blanquirrojos fueran considerados como el menos favorito de los cuatro semifinalistas. Solo se les otorgaba un 21% de opciones de levantar la séptima, aunque tras el impulso ante el United, en el cruce directo ante los italianos todo se igualó mucho, deparando un 53% de posibilidades de clasificación italiana y un 47% para los de Nervión. Algo que se acentuó mucho más en la gran final, pero ni entonces la inteligencia artificial se puso del lado sevillista. La AS Roma de Mourinho partía, unos días antes de la final, con un 51% por un 49% del Sevilla FC, pero a estas alturas, todo el mundo sabe ya que la remontada no fue solo futbolística sino también matemática.