LA IMPORTANCIA DE COMENZAR GANANDO EN CHAMPIONS
Cinco años después el Sevilla FC regresa a la Liga de Campeones, esta vez en la fase de grupos. Y lo hace con el reto de hacer la machada, pues el pase a octavos se va a vender muy caro ante rivales de la talla del Manchester City, Juve y un Borussia que, pese a su mal momento, no deja de ser un equipo alemán, con la alta fiabilidad que ello conlleva.
Todas las opciones para estar en octavos, sin duda, pasan por ser fuerte en casa y, a partir de ahí, dar la talla fuera y arañar lo que se pueda. Por eso el choque de este martes es de suma importancia, porque siempre es clave comenzar sumando de tres, pero sobre todo porque en casa es casi imprescindible si se quiere aspirar a estar en la siguiente ronda.
El Sevilla no ha arrancado como se esperaba, sobre todo por las altas expectativas que se habían levantado por la planificación deportiva efectuada en el verano. Sin embargo, precisamente por eso, por el nivel que hay en la plantilla y por la trayectoria más que contrastada de Unai Emery, este equipo tiene que arrancar más pronto que tarde y no hay mejor ocasión para hacerlo que en Liga de Campeones, donde el margen de error es mucho más estrecho que en la Liga. El Sevilla necesita un partido de altura para creérselo y este martes lo tiene ante sí.