“Sólo llevo dos goles y puedo ayudar más al equipo”
Hay que recordar que precisamente fue el central francés quien inició el camino hacia la hipotética final. Un gol que llegó en el momento preciso porque “sabemos que ofensivamente son muy buenos, antes habíamos fallado un penalti, ellos estaban frescos. Teníamos que hacer un gol antes que ello, con la rapidez de Gameiro pudimos aumentar distancias y hacer más goles. Para mí fue importante marcar, pero llevo sólo dos goles y puedo ayudar más al equipo”.
Rami es ambicioso, de eso no cabe duda, y parte de su personalidad la ha forjado su pasado, pues no fue fácil llegar a la elite: “Trabajé desde los 16 años hasta los 20 de mecánico. Era un momento difícil porque no era el trabajo que quería hacer, por las tardes entrenaba con mi equipo, el Fréjus. Yo nunca pensé que iba a llegar a ser profesional, pensaba que sería imposible, ahora me parece todo increíble”.
“Unai es el entrenador que necesitaba”
Esta experiencia de vida le permite tener confianza plena ahora en cada reto: “Creo que podemos lograr todo, que podemos lograr la semifinal, un título, no tengo límite, creo en todo con el Sevilla, con este gran equipo, gran entrenador y jugadores”.
Continuó hablando precisamente del técnico: “Emery es el entrenador que necesitaba. Cuando recibí su llamada no me lo creí, pensaba que era una broma de la radio o algo así. Cuando le escuché, no me lo pensé. Sabía que me vendría genial porque le gusta el perfil de jugador que soy y ahora rindo al 100%. Con él se aprende cada día, tienes ganas de mejorar sin parar y es un gran entrenador”.
La actitud de Rami es también clave para su rendimiento: “Es verdad que conozco mis cualidades, soy peleador, me gusta transmitirlo tanto en el entrenamiento como en el campo, estoy loco por la victoria. Y cuando escucho a la afición cantando el Himno en casa y terminan, pienso que hay que pelear por ellos”.
El internacional francés aseguró que su familia disfruta muchísimo con la afición: “Mi mujer, mi madre o los amigos que vienen siempre me hablan de la afición cuando termina el partido. Para mí es la mejor afición que he conocido en toda mi carrera, me recuerda a la del Liverpool”.
Por último, preguntado por el mejor momento en el Sevilla FC hasta la fecha, “hay muchos momentos buenos que recuerdo, pero fue especial el partido en la Supercopa con el FC Barcelona. En el autobús del hotel al estadio, antes de jugar vivimos un ambiente increíble en el autobús. Todos saltando y cantando, fue un ambiente increíble, todos peleando en el autobús, fue algo que me marcó”.