El Sevilla FC arranca con triunfo y seis goles a favor un campeonato de Liga que promete emociones fuertes a raíz de lo visto esta noche en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Eso sí, hubo dos partes bien diferenciadas marcadas por el descanso. En el primer tiempo todo lo bueno que se generó arriba se perdió por la falta de consistencia atrás, pero en el segundo acto el Sevilla ajustó mucho más en defensa y con un ritmo de juego demoledor pasó por encima de un Espanyol que poco pudo hacer para frenar el ciclón nervionense.
Después de los partidos ante el Madrid y Barça, había ganas de ver al Sevilla FC ante un rival que no fuera superior sobre el papel. El Sevilla salía con un once de circunstancias, formando con una defensa de tres compuesta por Mariano, Pareja y Mercado, ocupando Vitolo toda la banda izquierda. El equipo salió mordiendo y atacando literalmente con los diez jugadores de campo en territorio del Espanyol. Los riesgos eran evidentes, pero muy pronto Vietto rozaba el tanto con un remate que salvaba Roberto con una gran intervención. Fue la primera de muchas, aunque el primer golpe lo dio el Espanyol, aprovechándose de una contra eficaz que culminó Piatti.
En la primera parte todo lo bueno que se generaba arriba se perdía por los riesgos que se corrían atrás
Lo que pudo ser un mazazo no lo fue y el Sevilla en apenas un cuarto de hora ya le había dado la vuelta al resultado con sendos goles de cabeza de Sarabia y Vietto, el del argentino, que antes había estrellado una chilena a la madera, al bote de un córner. El Sevilla se gustaba pero seguía jugando en el filo de la navaja, tanto así que el Espanyol de nuevo se puso por delante, aprovechando dos pérdidas fatales en la salida de balón de los hispalenses. Los periquitos mataban en unas contras letales debido a que los locales, principalmente por la izquierda, donde Vitolo sufría y mucho, se veían superados siempre en número en el repliegue.