El excelso interior derecho sevillista se ganó el apelativo de salvavidas en su faceta como entrenador, ya que en cuatro ocasiones se hizo cargo del equipo en circunstancias adversas y en casi todas ellas logró salvar al equipo del descenso de categoría. Sólo completó como técnico la temporada 1968/69, consiguiendo el ascenso a Primera División. Fue sustituto primero de Eizaguirre, después de Barinaga, y también de Antonio Barrios, pero en esta ocasión, cuando lo llamaron, era tarde y el equipo descendió. Padeció la venta de tres grandes futbolistas: Ruiz Sosa al Atlético de Madrid, Gallego al Barcelona y Marcelo Campanal al Deportivo de la Coruña. Siendo él el entrenador acaeció la muerte de Pedro Berruezo en Pasarón.
Etapas como entrenador: 1965/1966; 1966/1967; 1967/1969; 1972/1973