Este miércoles el Sevilla FC se jugará en el Ramón Sánchez-Pizjuán el billete para jugar su cuarta final de Copa en el actual siglo, la número 17 desde la de Eindhoven en 2006. Lo hará con un favorable empate a uno en la ida, pero fundamentalmente con el punto fuerte de poder encomendarse al calor de las gradas de Nervión, que en unas semifinales son prácticamente infalibles.
Sólo en las semifinales de la Copa de la 03/04 y de la 12/13 -en ambos casos con resultado desfavorable en la ida-, el Sevilla FC no pasó a la final jugándose la vuelta en casa. Sí lo hizo en la 05/06 contra el Schalke, en la 06/07 contra el Osasuna en UEFA y contra el Deportivo en Copa y en la 15/16 contra el Shakhtar Donetsk.
En Copa, cuatro de las últimas cinco semifinales disputadas por el Sevilla FC se resolvieron a domicilio, dos de forma favorable -ante el Getafe en 2010 y contra el Celta en 2016- y dos de forma contraria -frente al Athletic en 2009 y ante el Madrid en 2011-. La que se decidió en casa se saldó con eliminación ante el Atlético.
Pocas veces, en definitiva, el factor del Ramón Sánchez-Pizjuán ha sido desaprovechado. Este miércoles el Sevilla FC volverá a tener en el aliento de su hinchada en Nervión su mejor aliado para meterse en una nueva final y seguir haciendo historia.