A BARCELONA EN BUSCA DE OTRA DE ESAS GRANDES NOCHES COPERAS

Posiblemente es el día más importante de lo que va de temporada, dejando al margen la Supercopa de España al haber un título en juego a partido único. En cualquier caso, el FC Barcelona se vuelve a cruzar en el camino de los nervionenses en una noche de muchas emociones. Será la cuarta vez que ambos conjuntos se vean las caras por cuarta vez en menos de seis meses. Aún quedará otro pendiente en Nervión, pero eso queda ahora mismo relegado a un plano muy inferior.

Lo que toca es afrontar un duelo histórico para los de Pablo Machín, que como es lógico no partían como favoritos ante el vigente campeón pero que se han ganado el derecho a la ilusión gracias al más que justo 2-0 del duelo de ida. Como es tónica habitual en este frenético mes de enero, el equipo cuenta con ausencias importantes y Machín deberá adaptar a las circunstancias lo que podría denominarse como equipo de gala, pero las ganas de dar un golpe en la mesa se notan en las caras de todos.

Machín deberá adaptar su once ideal a las circunstancias por lesión

El técnico, eso sí, ha podido incluir a tiempo al último en llegar, el croata Marko Rog, que tras una única y leve sesión junto con sus compañeros, ha sido incluido en una lista en la que habrá que realizar un descarte a última hora. También se montarán en el avión el canterano Javi Vázquez y dos jugadores que han estado los últimos días entre algodones, como son Wöber y Sergi Gómez. En lo negativo, hay que hacer recuento en una enfermería en la que se quedan Nolito, Aleix Vidal, Jesús Navas, Escudero, Munir y Gnagnon.

Ya ha reconocido el entrenador que la idea no es otra que plantarse en el Camp Nou con la idea de juego que les ha traído hasta aquí y sobre todo buscar un gol que obligaría a los locales a anotar cuatro para darle la vuelta a la situación. Todo ello en una mala racha de resultados en territorio barcelonista, con el paréntesis en esta misma competición en 2010 y que podría tener su colofón con otra eliminatoria para el recuerdo.

Todos coinciden en que un gol de visitante aclararía mucho la situación

El resultado no es sencillo ni tan siquiera para los azulgranas, que sólo en una de las siete ocasiones en las que han afrontado la vuelta de una eliminatoria copera con un 2-0 en la ida, han sido capaces de remontar la situación y de eso hace mucho, porque la única vez fue en los octavos de final de la Copa 55/56 frente al Mallorca, cuando le dieron la vuelta al 2-0 de la ida con un 5-1 en el segundo encuentro. La última vez que los culés afrontaron ese resultado adverso en la vuelta en el Camp Nou fue en la 91/92 ante el Valencia. El choque decisivo acabó con 3-1, pero por entonces el valor doble de los goles a domicilio no se tenía en cuenta y hubo que llegar a los penaltis, donde el conjunto ché sí logró desequilibrar la balanza. Por otro lado, el Barça no queda fuera de la competición a doble partido desde las semifinales de la 12/13, cuando cayó frente al Real Madrid.

El debate está servido. A estas horas nadie sabe qué tendrá decidido Ernesto Valverde sobre si contará o no con la principal estrella de su equipo y una de las más rutilantes del panorama internacional. Messi ya se perdió la ida en Nervión y el pasado fin de semana participó los 90 minutos en Montilivi ante el Girona. Cillessen quizás sea el único que tiene el puesto asegurado y a partir de ahí todo está a expensas del planteamiento del técnico extremeño. El murciano Sánchez Martínez dirigirá un partido que se prevé intenso y que dejará a uno de los dos a dos partidos de la final que disputaron hace nueve meses.