El Sevilla FC no defraudó a su gente y estará en los octavos de final de la UEFA Europa League. Con un gol en cada periodo y una grada que acabó saboreando un nuevo triunfo continental, el equipo tuvo que sobreponerse a la expulsión de Franco Vázquez con media hora por delante, tras la cual pasó sus peores minutos de la eliminatoria. A la Lazio le hacían falta dos goles, pero la roja directa de Marusic igualó las fuerzas y obligó a los italianos a dejar de creer. Eliminatoria número 18 superada de forma consecutiva por el equipo nervionense en la competición, que le permitirá estar en el bombo este próximo viernes.
Mucho se había hablado de la alineación, con Roque Mesa ganándose el puesto del sancionado Banega, pero apenas cuatro minutos después del pitido inicial, Machín se veía obligado a modificarlo. Una evidente lesión muscular de Escudero al iniciar una carrera le obligaba a dejar su sitio a Quincy Promes. El Sevilla comenzó queriendo y tocaba el balón buscando espacios, con una Lazio bien plantada y física, pero a la que le costaba inquietar y poner en duda la eliminatoria. Eso sí, un error de coordinación pasado el cuarto de hora tras un balón al espacio permitía recibir a Lulic al borde del área libre de marca. La rapidez de reflejos de Vaclík evitó males mayores pese al remate del bosnio, mientras que Roque Mesa evitó el peligro con un potente despeje. Justo después veía la amarilla Vázquez por una mano al borde del área propia y Cataldi enviaba de libre directo por encima del larguero. El partido estaba abierto sin tener en cuenta lo ocurrido en la ida, pero cualquier zarpazo sevillista podía dar un golpe de timón.
Una acción de fe de Ben Yedder dio origen al gol del francés, que empezó a mostrar el camino
Y de eso se encargó Wissam Ben Yedder, que se inventó el 1-0 casi de la nada antes de llegar al ecuador del primer tiempo. Acción personal del francés, que se va de hasta cuatro jugadores y llega a la frontal para ceder a Sarabia. El madrileño prueba a Strakosha junto al palo y el meta albanés despeja, pero la deja muerta para que el propio Ben Yedder anote el primer gol del partido totalmente solo. Mucho protestaron la jugada los italianos y de hecho Patric fue amonestado, pero las imágenes demostraron que en el momento del lanzamiento de Sarabia, Wissam estaba en posición correcta. El gol dio lugar a un partido algo más enrevesado, en el que los de Inzaghi no terminaban de arriesgar para buscar el primero de los dos goles que necesitaban, mientras que el Sevilla no se encontraba en ataque más allá de los chispazos de Ben Yedder. André Silva tuvo una de las más claras con un centro de Vázquez que el portugués no consiguió conectar de forma correcta, pero los intentos más claros hasta el descanso fueron romanos. Primero Immobile con un disparo potente pero desviado y luego Milinkovic de cabeza cerraron el capítulo de ocasiones del primer tiempo.