Obviamente lo más importante estaba sobre el césped y con el balón de por medio, pero esta era una noche para que los aficionados presentes en las gradas de Nervión pudieran embriagarse con el ambiente y echar su memoria hacia atrás. Todos menos los más pequeños, los que aún no tenían uso de razón hace 13 años, no tuvieron más remedio que sentir un pellizco en el alma cuando vieron al Schalke 04 sobre el verde de la Bombonera. Nada queda, en cuanto a nombres, de aquel equipo que se quedó a las puertas de Eindhoven un Jueves de Feria, pero el cartel del partido evocaba demasiados recuerdos en esta -también primaveral- noche sevillana.
LOS VIEJOS RECUERDOS VOLVIERON A FLORECER
Ya en los prolegómenos se palpaba que era un partido especial, con los pequeños de la Escuela de Football Antonio Puerta dándole colorido a los minutos iniciales con sus banderas. Aún con algunos minutos de espera por delante, otro momento para el recuerdo con la salida al césped de muchos de aquellos héroes que consiguieron la proeza en 2006. Javi Navarro, Martí, David Castedo, Kepa Blanco, Aitor Ocio, Pablo Ruiz, Alejandro Alfaro, Antoñito, Sales o un Dani Alves que se unió en el último momento, saltaron con la camiseta de la presente temporada para ser homenajeados por el respetable. También estuvo Palop, aunque sin tiempo material para unirse a sus compañeros para la foto. Justo después, ya con los jugadores también en la hierba, no dudaron en posar con los once en una imagen irrepetible.
Muchos de los protagonistas de aquella eliminatoria de 2006 saltaron al césped antes del pitido inicial
Y de ahí al recogimiento, con un respetuosísimo minuto de silencio en memoria de Antonio Puerta, pero también del jugador verdiblanco recientemente fallecido Rogelio Sosa. Momentos inmediatamente previos a la aparición en escena, un año más, de un Aitor Puerta que en sí mismo es clara muestra del paso del tiempo. Con su característica melena rubia, Aitor le pegó con fuerza desde el círculo central para recibir una sincera ovación de las gradas del Ramón Sánchez-Pizjuán. De ahí al fútbol, aunque pasados apenas 16 minutos, todo se volvió a parar. Y es que el minuto de Antonio Puerta en todos y cada uno de los partidos en el RSP no podía pasar desapercibido esta noche.
Se apagó hasta la luz, para que aparecieran en el terreno de juego David Castedo, Javi Navarro y Asamoah. Con ramos de flores en sus manos y seguidos por una luz, los tres se encaminaron hacia la línea de fondo de Gol Sur, cerca del córner con Preferencia, para depositar los ramos mientras volvían a aparecer los sentidos aplausos. Tocaba volver a centrarse en el fútbol hasta el descanso y es que fue en el intermedio cuando se fijó uno de los grandes momentos de la noche. Antonio Ángel, sentado frente a su piano, deleitó a los espectadores con una magistral ejecución del Himno del Centenario, del mismo modo que lo hizo en el Aeropuerto de Fiumicino, el día posterior al Sevilla-Lazio, de forma casi improvisada.
Antonio Ángel, con su piano, motivó uno de los grandes momentos de la noche con su ejecución del himno del Centenario
Unos minutos que quedarán en la retina de todos los presentes y que sirvieron para afrontar con más ánimo aún la segunda parte, en la que el Sevilla FC certificó su octavo Trofeo Antonio Puerta. Y es que hasta eso salió a la perfección en una noche de mucho sentimiento y en el que el sevillismo, como nadie dudaba, supo estar a la altura. Toca ahora descansar unas horas antes de que vuelva la competición, con el Valencia y el Alavés en el horizonte con dos partidos fundamentales en casa para el devenir de la temporada.