JESÚS NAVAS ALCANZA LOS 350 PARTIDOS EN PRIMERA, SEGUNDO EN LA HISTORIA DEL SEVILLA FC

Jesús Navas sigue batiendo récords con la camiseta del Sevilla y parece no tener techo ni nada que se le parezca. El palaciego, con su participación en la victoria de este domingo ante la Real Sociedad, alcanzó los 350 partidos en Primera división como jugador del club nervionense, superando los 349 que ostentan Arza y Campanal II. De este modo, el capitán del Sevilla FC solo tiene ya por delante a Manolo Jiménez, con tan solo cuatro encuentros más, 354, cifra que Navas superará presumiblemente en un corto periodo de tiempo. 

En las tres centenas y media de partidos con el escudo sevillista, Navas ha anotado 25 goles y ha repartido 69 pases de gol entre todos los compañeros con quienes ha compartido vestuario y minutos sobre el césped. El lateral derecho, preguntado tras el choque, no se ponía metas: "Ojalá pueda seguir durante muchos partidos. Quiero que sea un gran año y no me fijo en los datos concretos. Disfruto tanto jugando que no pienso en eso", declaraba en zona mixta. 

Jesús Navas ha marcado 25 goles y dado 69 asistencias en 350 partidos en Primera, haciendo un total de 35 goles y 94 pases en sus 488 como sevillista

En total, el de Los Palacios acumula 488 encuentros oficiales en su carrera deportiva en el club nervionense, 127 más entre UEFA Europa League, Copa del Rey, Liga de Campeones, Supercopas de España y Supercopas de Europa. En todos estos ha conseguido 9 tantos y 25 asistencias, lo que totalizan 35 dianas y 94 participaciones con pases de gol, estando tan solo a 6 de alcanzar la centena. 

Después de haber superado ya con creces los 415 choques que jugó Pablo Blanco como sevillista; Jesús Navas, que regresó en la 17/18 al club que le vio nacer después de su paso por el Manchester City, parece decidido a dejar el listón si no inalcanzable para el siguiente, en prácticamente imposible de batir, pues a sus 33 años -cumplirá 34 en noviembre- continúa pateando la banda derecha del Ramón Sánchez-Pizjuán con la misma destreza que el día en que Joaquín Caparrós lo hizo debutar.