"A los sevillistas -y perdón por la voz porque estoy ronco de tanto gritar y de tanta alegría-, les digo que hemos luchado contra un equipazo con un presupuesto enorme. Hemos tenido que sufrir porque tienen mucha calidad. Les digo que disfruten de la victoria, de ir dando pasos para llegar a lo que ya hemos llegado, a una final tan complicada. Cuando llegamos a una final lo que hay es que ganarla, y generalmente las ganamos".
Como siempre, el presidente se acordó de su gente: "Lo que estamos viviendo es grandioso y la pena es que no lo vivan los nuestros. 2020 es así y al menos suplimos un poco ese sufrimiento. Les damos la posibilidad de llegar a otra final y tienes que acordarte de los aficionados, que son por los que vamos a conseguir esto seguro. En algún momento podremos compartir todo esto que estamos viviendo".
"En algún momento podremos compartir con nuestra gente todo esto"
Y es que esta ha sido una semifinal muy diferente: "Me imagino cómo estarán las casas, los bares y las peñas y donde estén los sevillistas. Disfrutando de una victoria tan difícil ante un rival que nos triplica el presupuesto. Ese es el fútbol, el Sevilla está metido en esta vorágine de intentar conseguir todo y con esta fe, ganas, ilusión y compañerismo estamos mucho más cerca. Hemos llegado a la final en la que se puede conseguir plata. Ojalá podamos llevarla para Sevilla, que sería inmenso".
Se habla de esas señales que tantas veces han aparecido... pero nada de eso llega sin ganárselo: "Las señales van llegando pero a base de esfuerzo, trabajo y de ser una piña. En el Sevilla, desde el primer empleado al último jugador trabajamos todos para lo mismo. Me siento tremendamente orgulloso de haber colaborado en lo que sea para que todos viremos en la misma dirección. La única forma de conseguir triunfos tan complicados es a base de utilizar mejor nuestras armas y tener unión entre todos. Nunca se debe perder eso para seguir optando a cotas cada vez más importantes".
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