Ivan Rakitic es feliz en su Sevilla. Desde Budapest y en la víspera de una final, el croata atendía a los medios oficiales: "Estoy muy bien y muy contento. Se siente mucho orgullo de poder representar de nuevo en una final al Sevilla, sabiendo lo que significa. Poco a poco van empezando los nervios, pero todo muy positivo y con muchas ganas de jugar la final. Creo que no hay que cambiar muchas cosas, pese a la dificultad de jugar ante el Bayern. Una final se juega para ganarla y vamos a intentarlo".
RAKITIC: "SIENTO MUCHO ORGULLO DE VOLVER A REPRESENTAR AL SEVILLA EN UNA FINAL"
El Bayern es un hueso duro de roer: "Han mostrado su superioridad y les felicitamos por la Copa de Europa, pero mañana es otro partido y seguro ellos también se hacen sus pensamientos sobre nosotros porque nos hemos ganado el respeto de Europa. Queremos intentarlo, hacer un gran partido y sabemos que todo es posible, haciéndole las cosas difíciles y peleando por el título".
Asegura que las buenas vibraciones de Colonia siguen vigentes: "Agradezco el trato del grupo desde el primer día. Estamos alegres y enchufados. Hemos entrenado muy bien y hay un ambiente espectacular. Se nota que han ganado hace poco la Europa League y hay un gran grupo. Se nota que se trabaja muy bien y nos veo totalmente preparados para competir ya".
"Hemos trabajado muy bien y el equipo está ya preparado para competir"
Seis años después, ha notado muchos cambios: "El club ha crecido mucho y ha dado un paso importante al siguiente nivel. Veo muchos cambios y las posibilidades son distintas a las que había cuando estuve aquí. Eso me alegra y me da tranquilidad de poder seguir avanzando porque hay todavía un gran camino por delante. Se unen muy bien las dos ambiciones. Es lo que me transmite la gente del club, las ganas de seguir compitiendo. Viene bien que el parón haya sido corto y se pueda mantener esa alegría de la temporada pasada a esta para conseguir grandes cosas".
Ivan ya sabe lo que es levantar un título con el Sevilla. Una experiencia que quiere repetir: "Es increíble. No se puede explicar en palabras si no lo has vivido. Es difícil esa mezcla entre emoción, ganas, nervios... Es una mezcla impresionante. Luego, ver a toda tu gente con la misma alegría es increíble y ojalá podamos repetirlo de nuevo. Lo entiendo perfectamente y de pensarlo ya tengo los vellos de punta. Es un momento único y entiendo a Jesús, claro. Es algo especial y ojalá todos podamos vivirlo de nuevo y disfrutarlo todos juntos".
"Levantar un título es algo que no se puede explicar con palabras si no lo has vivido"
Poco se puede descubrir sobre el Bayern a estas alturas, aunque el centrocampista quiere ponerles las cosas difíciles: "Es uno de los pocos equipos que ha conseguido ir hasta el siguiente paso en los últimos años. Es muy competitivo y tiene una gran plantilla. Tiene un entrenador que lleva poco tiempo pero los conoce perfectamente y se ve que transmite todos los detalles. Es una mezcla muy importante entre jugadores con experiencia y jóvenes que van llegando. Arriba tienen la capacidad de decidir los partidos y les tenemos mucho respeto, pero no miedo. Quiero disfrutar ante el mejor equipo e intentar hacerles sufrir".
El Sevilla FC es un club de élite con un vestuario cercano: "En el ambiente, la forma en la que van todos juntos, es algo que pocas veces se puede ver al máximo nivel. Es un ambiente de amistad y de ir a por todas. Me recuerda mucho al equipo de 2014 y ojalá eso pueda llevarnos al siguiente paso. Podemos dar mucho, mejorar detalles y vamos a trabajarlo para que ese ambiente nos lleve a ser aún más fuertes. Yo quería entrar en el grupo como uno más porque quiero lo mismo que ellos, lo mejor para el Sevilla. Quiero que sepan que estoy siempre disponible para todos y que juntos podemos crear una gran fuerza. Quiero ayudar con mi experiencia de estos años para transmitirles confianza y estoy encantado de estar aquí. He intentado conocer a todos, ya había coincidido con algunos como Munir o Escudero y también hablo mucho con Gudelj porque el croata y el serbio son muy parecidos. Me llevo mucho con Jesús y también he tenido contacto con Ocampos y el Mudo. Se ve un equipo muy unido y una gran familia".
"Quería entrar como uno más porque quiero lo mismo que ellos, lo mejor para el Sevilla"
Ya se ha sentado con Lopetegui: "Hemos hablado un poquito aunque no ha habido mucho tiempo. Han pasado rápido estos días pero hemos analizado varias cosas y creo que el míster me va conociendo cada día más como yo a él. Le agradezco a él y a su cuerpo técnico el recibimiento". Y es que ya se sentía parte incluso antes del cierre de la 19/20: "Le dije a Monchi que con ese coraje iban a ganar la Europa League. Se veía a la gente del staff saltando y gritando, los suplentes viviéndolo intensamente y ahí se marcó la diferencia ante los demás. Se ha ganado a equipos con presupuestos muy superiores, pero con esa unidad y esa humilidad no me sorprende tanto, pero los felicito por el esfuerzo para poder estar aquí".
Reconoce que su adiós a la selección es un momento complicado: "Es quizás la decisión más difícil de mi carrera. Ningún jugador quiere que llegue, pero después de 13 años, 106 partidos y todo lo vivido en Rusia, creo que ha llegado el momento perfecto. Agradezco el trato que me han dado siempre, pero creo que ha llegado el momento de centrarme al 100% en mi equipo y apoyar a la selección desde casa, que saben que voy a ser el fan número uno". Para terminar, se refirió a su forma de volver al equipo: "Si alguien te da la libertad de prepararlo todo lo haría así. Poder jugar mi partido 150 con el Sevilla en una final contra el Bayern es impresionante. Llego con muchas ganas de trabajar, transmitir ilusión y de empezar ya. Ojalá podamos levantar la copa con mis compañeros".