Los partidos lejos de Nervión han sido una asignatura pendiente para el Sevilla FC en grandes periodos de su historia. Durante décadas, más aún en un fútbol en el que el factor campo tenía mucho más peso, al equipo nervionense se le atragantaban las salidas lejos del Sánchez-Pizjuán. Tanto es así que hubo que esperar a la temporada 2004/05 para lograr por primera vez tres victorias ligueras como visitante consecutivas. Fue de la mano de Joaquín Caparrós, ya en la recta final de aquel ejercicio, cuando entre marzo y abril de 2005 se logró un nueve de nueve en Mallorca, Montjuic y San Mamés.
Tres lustros y algunos meses más tarde y con Julen Lopetegui en el banquillo, el Sevilla consiguió anoche en Mestalla encadenar tres victorias fuera en LaLiga por séptima vez. Con el técnico en el vasco es, de hecho, la segunda vez que se consigue, pues ya lo logró en sus tres primeros duelos ligueros como blanquirrojo a domicilio, ante Espanyol, Granada y Alavés. Curiosamente, en ambas ocasiones se consumó ese triplete sin encajar ni un solo tanto, pues el Sevilla se mantiene imbatido a domicilio en la competición de la regularidad desde el pasado 31 de octubre en Bilbao.
Seis victorias a domicilio seguidas y solo dos goles encajados, uno de ellos de penalti
Pero si hay una estadística que remarca la buena dinámica sevillista en la actualidad es haber sumado la sexta victoria seguida fuera de casa entre todas las competiciones, algo que el equipo no había conseguido hasta ahora en su centenaria historia. Para más inri, un tercio de los partidos de esta racha se consiguieron en la competición de clubes más exigente del mundo, la UEFA Champions League. Krasnodar, Huesca, Rennes, Getafe, Ciudad de Lucena y Valencia. Todo ello con cuatro porterías a cero y un solo gol encajado tanto en Rusia como en Francia -este último de penalti-.
Inmejorable cierre del 2020 en este sentido, aunque los choques lejos de Nervión volverán ya el segundo día del nuevo año. Lo harán eso sí, lo más cerca posible de Nervión, en un Estadio Benito Villamarín que podría seguir ampliando la racha. De ganar en el derbi no solo se mejoraría el récord de todas las competiciones con siete partidos, sino que también se rompería la barrera, por primera vez, de cuatro victorias ligueras seguidas a domicilio en una misma temporada.