Marko Dmitrovic, guardameta del Sevilla FC, ha sido el protagonista en la edición de este jueves de 'A Balón Parado', donde ha comentado diferentes momentos de la actualidad sevillista. El serbio arrancó destacando a los desplazados blanquirrojos ayer a Córdoba, diciendo que "la afición en el día de ayer estuvo de diez, increíble. Son nuestro jugador número doce y somos privilegiados de tener una afición así, nos empujan en cada momento que necesitamos".
El arquero recordó el momento de hace dos temporadas en que, tras subir a rematar, casi le marca un gol a Ocampos, que se encontraba en ese momento de portero por la lesión de Vaclík: "Casi, pero casi no me vale. No me daba tiempo a pegarle bien y de estirarme. Jordán casi me bloquea y al final Lucas hace un paradón, como él dice, pero yo creo que se la encontró porque lo único que hace es estar bien colocado. Le hizo caso a Silva y le salió bien", bromeó.
"No pasó ni un mes desde que me llamó Monchi para que alcanzásemos un acuerdo"
El guardameta sevillista relata cómo fue su fichaje por el Sevilla FC: "Tenía ofertas, pero con la carta de libertad siempre se es más atractivo en el mercado y el covid había afectado a todo el mundo. Jugaba siempre en el Eibar y estaba contento, pero mi idea era dar un paso grande y llegar a un equipo que jugase Europa y pudiese ganar todos los partidos que jugaba. No pasó ni un mes desde que me llamó Monchi para alcanzar un acuerdo. Sevilla era mi lugar favorito para este camino".
Dmitrovic, se definía así: "Nunca he bajado los brazos, soy ambicioso y siempre lo voy a ser, pero siempre partiendo de ser realista. Si me gusta el tenis no puedo pensar que voy a ganarle a Djokovic porque no sé coger la raqueta. He tenido muchas piedras y barreras por el camino, pero siempre he confiado en mí mismo. Pasé momentos duros cuando me fui de casa y cuando llegué al Alcorcón empecé a disfrutar del fútbol porque fue donde empezó mi proyección".
"Jesús Navas es un ejemplo de profesional y persona, quiere entrenar siempre con la edad que tiene"
Finalmente, el serbio alababa al capitán del equipo, Jesús Navas, y el club donde se encuentra: "Tiene cuerpo de niño, parece que va a jugar diez años más. Es un profesional y persona top. Quiere entrenar siempre y con la edad que tiene es increíble cómo se cuida. No se ha perdido nunca un entrenamiento salvo ahora que está lesionado. Es un verdadero ejemplo.
"El Sevilla tiene mucha calidad. Entre Eibar y Sevilla hay un mundo en tema de calidad de futbolistas, de toma de decisiones, el contacto con el balón es mucho más rápido... Todo va a dos o tres marchas más diferentes a los equipos donde he estado antes", concretó.
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