De Sur a Norte. De Sevilla a San Sebastian. Ese ha sido el desplazamiento que le ha tocado al equipo hispalense en el retorno de la Liga tras el parón por los compromisos de las selecciones. Y justo en la semana de uno de los estrenos cinematográficos más esperados, en el Sevilla es facil encontrar ocho apellidos que comporten algo novedoso en este viaje. El primero, Emery. El técnico vasco vuelve a casa. Fueron cerca de veinticinco años viviendo en su Hondarribia natal y diez de ellos enrolados a la entidad de la Real Sociedad.
Con la que mañana será camiseta rival, Unai debutó en Primera División como furtbolista. Zurdo exquisito. No tuvo demasiada suerte. A todo familiar que quiera ir al partido en Anoeta le pone una condición: "El que quiera verlo, tiene que ir con el Sevilla". Su gente le esperaba en el aeropuerto para brindarle un cariñoso recibimiento. Es un viaje diferente para Emery, sin duda. Es especial. Gameiro es el segundo apellido. Titular indiscutible hasta su lesión, regresa a una convocatoria con ganas de recuperar una camiseta con varios candidatos. El año pasado anoto el 2-3 de penalti en Anoeta en el minuto 78...pero la cosa acabó bastante mal. El tercer apellido es italiano: Immobile. Tras su primer gol como sevillista, la sonrisa de Ciro es distinta. Quiere minutos y sentirse importante. Su partido ante el Real Madrid reafirma su nivel de confianza. El cuarto es riojano. Llorente también llama a la puerta de la titularidad. Otro que viene de marcar y que sigue avanzando en su adaptación al equipo. Visitar Anoeta es distinto para él, con aquellos duelos defendiendo la camiseta del Ahletic Club en su memoria mas reciente.