Caprichoso desenlace el que tuvo el choque disputado este sábado en el Nuevo San Mamés, donde el Sevilla FC impuso su ley desde el inicio. Sin embargo, al borde del receso los nervionenses sufrieron un duro golpe que los sumió en una pesadilla de la que no lograron despertar. Tras una magnífica primera mitad, el gol de Vesga sí logró avivar a los locales, que supieron desactivar el fútbol de los de Berizzo, muy desdibujados en el segundo acto.
Sí supieron macerar el encuentro hasta cumplirse los primeros veinte minutos, tiempo para el que ya se habían encontrado con dos obstáculos en su camino. El primero, un penalti no señalado por Iglesias Villanueva de Raúl García sobre Lenglet. El segundo, el cambio obligado de Krohn-Dehli por Nzonzi, que abandonaba el verde con molestias en su tobillo izquierdo.
Cambio obligado a los veinte minutos de Krohn-Dehli por Nzonzi, que abandonaba el tapete con molestias en el tobillo
Sin embargo, se sobrepuso a ello de tal forma que obligó a Kepa a ser el mejor de los suyos con un carrusel de ocasiones que inauguraría Navas con un pase al área chica al que ni Franco Vázquez ni Correa llegan a tiempo. Tras ella, Corchia de falta directa pondría de nuevo a prueba al guardameta local, que veía bajo los palos cómo los nervionenses comenzaban a encontrar los espacios de una débil zaga bilbaína y a pisar área con fuerza.
Tanto que apenas un minuto después la tendría Ben Yedder a pase de Franco Vázquez, aunque el franco-tunecino no remataría cómodo y, una vez más, Kepa actuó. Mismo protagonismo que tomó en un disparo de Carole sacando una providencial mano que evitó el tanto de los sevillistas en otra clara ocasión para los de Berizzo.
Vesga obró magia en una jugada aislada cuando más cerca estaba el Sevilla FC del gol
Y si los de Ziganda sólo lograron acercarse a la meta de Rico con un disparo de Susaeta que el de Montequinto acierta a enviar a córner, afanados en achicar atrás las acometidas visitantes, una jugada aislada que nace de un saque de banda les ofrecería un premio totalmente inmerecido. Vesga desdibujó en apenas un minuto la hegemonía protagonizada por el Sevilla FC en la primera mitad.