Día grande en Nervión y van… El sevillismo se apresta a vivir otra noche histórica ante un rival también histórico, buscando ambos el premio de las semifinales europeas del segundo torneo continental. Para el Sevilla FC sería la tercera consecutiva, palabras mayores. Nadie lo hizo con anterioridad en la UEFA Europa League. Si el reto es glorioso no debe menguarlo ni un ápice las experiencias ya vividas, ya que hay que vivirlo como si fuera la primera vez. El legendario gol de Puerta con el que empezó todo hace ahora diez abriles, señalando la senda de la gloria, tenía tintes de quimera, de sueño por disfrutar. Pero, transcurrida una década, el ensueño debe permanecer nítido, diáfano, como parte de las mejores esencias futbolísticas, aunque con el sello ilusionante de la primera ocasión. Es la vuelta de los cuartos de final de la UEL; y otro camino se abre en Nervión para tocar de nuevo el cielo deportivo.
Es vital no defender el 1-2 de San Mamés sino afrontar la vuelta pensando en la victoria
La mejor versión de los nervionenses puso las bases hace siete días para disputar la vuelta con la mayor confianza en el gran Sevilla. Dos claves: respetar con humildad al Athletic Club y olvidar el magnífico 1-2 de la ida en San Mamés, un feudo inexpugnable hasta entonces este año en Europa. Es más, ganar en El Bocho remontando el 1-0 de su goleador Aduriz, en la 2ª mitad, reflejan el oficio, el carácter y la convicción, que es menester mantener en el difícil compromiso de este jueves: no defender el resultado de la ida, sino ir a por el triunfo sin más. Los goles de Kolo e Iborra están ahí, pero no darán el pase a semifinales si no se completa la eliminatoria con continuidad, como avisó el propio Emery tras la victoria en terreno vasco.