Diego Martínez valoraba el alto grado los tres puntos cosechados ante el Mirandés, en un partido en el que nuevamente tuvo que lidiar con las bajas: "Independientemente de los jugadores que han estado sobre el césped, la identidad ha sido la misma y eso es lo que más orgulloso me hace sentir. Estos siete últimos puntos de nueve, por las adversidades y las circunstancias que hemos atravesado tan difíciles, merecen todo el refuerzo positivo por nuestra parte, más aún en este momento de la temporada".
El Mirandés inquietó en los primeros minutos, algo con lo que ya contaba el técnico: "No es que estuviésemos mal, pero ellos son un equipo de intercambiar golpes y sabíamos que el que fuera más eficaz lo decantaría. Ellos tienen una forma de jugar muy particular y generan ocasiones, pero sabíamos que íbamos a encontrar acciones como la del gol. En la segunda parte controlamos mejor ese intercambio y la intención fue de ir a por el segundo gol".
Con la baja de larga duración de Ivi, Martínez prefiere centrarse en lo que está en su mano. "Esperamos que el recurso surta efecto, pero vamos a controlar lo que dependa de nosotros y prepararemos el partido de Getafe. Intentaremos que los que se incorporen den su mejor nivel y ojalá la sanción se rebaje".