Volvía el Sevilla Atlético al Viejo Nervión necesitado de puntos y lo hacía recibiendo al más difícil todavía, a una SD Huesca que huele a Primera división y cada semana que transcurre con mas solidez en la competición. El filial, a pesar de volver a realizar una buena primera parte y plantar cara a un poderoso rival, volvió a remar para morir en la orilla.
Transcurrió una primera parte que finalizó con empate a cero goles pero que anduvo muy entretenida para el espectador y en la que se generaron ocasiones por parte de ambos equipos. La más clara, en las botas de Aburjania, que tras un magnífico pase de Lara al borde del área grande ajustaba demasiado el remate y el balón se iba lamiendo la cepa del poste.
Llegaría posteriormente la SD Huesca por parte de Moi Gómez, quien se plantaba tras una bonita pared delante de Juan Soriano, que evitaba magistralmente el tanto oscense. Llegaría una vez más el conjunto de Tevenet antes del descanso, en esta ocasión en la figura de David Carmona, quien llegó forzado a línea de fondo y su remate lo rechazó el guardameta visitante.