Tras el empate cosechado en la Nueva Condomina frente al Real Murcia, donde el filial mereció algo más que el punto conseguido, el conjunto franjirrojo viajaba hasta Ibiza para buscar la primera victoria del año en un encuentro marcado por un terreno de juego de césped artificial al que no acostumbran los hispalenses.
El primer tiempo arrancó con un claro dominio por parte del conjunto dirigido por Andrés Palop. Al filial sevillista, obligado a entenderse con el césped, le costó entrar en la dinámica de la contienda. Fueron en los primeros compases cuando los azules se sintieron más cómodos. Serra y Javi Vázquez dejaron un bonito duelo sin vencedor por la banda más pegada a los banquillos. Más tarde, el ataque local pasó a nacer por la banda izquierda. Allí nacía el centro que Berrocal, con muy poca fortuna, despejaba hacia dentro de la portería que defendía su compañero Javi Díaz. El guardameta sevillista nada podía hacer para evitar el gol en propia puerta del jerezano.
Berrocal, en un mal despeje, enviaba el balón hacia dentro de la portería defendida por Javi Díaz