Coke Andújar pasó a la historia, hace hoy cuatro años, como el héroe de Basilea. El madrileño rememoró aquel día inolvidable este lunes en Solo el Sevilla de SFC Radio: "Lo recuerdo como un día redondo en el que sale todo y metes dos goles en un partido de tanta repercursión. En Basilea jugué más adelantado y mi misión era llegar ahí arrriba. En el primer gol la vi por ahí y tuve la suerte de que entró. En el segundo el momento de juego estaba mucho mejor para nosotros, hago el primer desmarque para Banega, que hace un recorte y me cae a mí el rechace. Sabía que estaba en fuera de juego pero que venía rebotada, así que la pegué con lo que tenía y fue para dentro. Hubo un momento de nerviosismo porque pensábamos que lo iba a anular, pero el árbitro sabía que venía de un rival".
COKE: "CUANDO VEO ESAS FOTOS Y RECUERDO AQUELLA NOCHE, PIENSO QUE SALIÓ TODO REDONDO"
La forma de encarar el segundo tiempo fue, sin duda, clave para el feliz desenlace: "No se nos podía escapar. Hicimos unos segundos 45 minutos, dada la repercusión y el rival, quizás los mejores de mis cinco años en el Sevilla. Todo empezó con una jugada de Mariano que empujó Gameiro y nos vinimos arriba después de haber sufrido en la primera parte. Cogimos confianza y ellos pensaron que les iba a ser difícil. El aspecto mental tuvo mucho que ver".
El lateral tiene claro qué une tanto al Sevilla con la Europa League: "Parece fácil decirlo después de ganar cinco, pero la gente se ilusiona mucho con esta competición y el Sevilla le ha dado tanto, que la propia competición se lo devuelve con momentos cumbre. Momentos que pueden decidirse para un lado o para el otro, pero se decide muchas veces para el Sevilla porque lo busca. Eso nos lo decía mucho Unai".
"Las cosas se han decidido muchas veces para el Sevilla porque lo busca"
Coke le da mucha parte de la responsabilidad de esos éxitos al vestuario: "De las tres seguidas, en dos años hasta la jornada seis no habíamos ganado. Eran equipos nuevos y recuerdo que nos juntábamos en el vestuario y hablábamos para opinar en qué podíamos mejorar. Teníamos un entrenador que nos entendía y cuando tienes a alguien en quien confiar, siempre vas a estar preparado para superar obstáculos".
El bagaje de Turín y Varsovia sirvió y mucho para encarar aquel partido: "En una final no se te dan segundas oportunidades y tienes que ir con todo lo que tienes. A lo mejor ellos podían partir como favoritos por palmarés, por la grada y por el gran equipo que tenían, pero nosotros veníamos de ganarla dos veces y con una trayectoria muy importante. Después de haberse ido 1-0 al descanso y siendo superiores, cuando ven que empieza la segunda parte y en la primera jugada les empatamos, es un mazazo gordo. El equipo cogió confianza y estuvimos más sueltos, con buen juego y ocasiones. Eso para ellos fue difícil de superar".
"Para ellos fue un mazazo gordo ver que en la primera jugada les empatamos"
Y aunque en número eran muchos más, el ruido sevillista fue el único que se hizo notar: "Recuerdo en el viaje de vuelta a casa que estábamos flipando en el avión con eso. Ellos eran más de el doble de aficionados, pero lo que se escuchaba eran cánticos del Sevilla. En la segunda parte, tanto deportivamente como en la grada, fue un baño del Sevilla".
Echando la vista atrás, Coke cree que supo disfrutar esos momentos: "Sientes satisfacción por lo que hicimos, orgullo y privilegio porque cuando empecé en esto, tocando el primer equipo del Rayo en Segunda B, en la vida soñaba con vivir esos momentos ni con jugar en Primera ni en Europa. Tuve la suerte de ganar tres Europa League seguidas en un vestuario con el que más no he podido disfrutar. Es imposible saborearlo más. Cuando veo esas fotos y recuerdo aquella noche, pienso que salió todo redondo".
"Gané tres Europa League con un vestuario con el que más no he podido disfrutar"
Sevilla siempre quedará en su corazón y es parada frecuente y obligatoria: "He disfrutado al máximo allí, tengo muchos amigos y siempre que puedo, vuelvo. Me ha marcado la ciudad y es donde me he desarrollado profesionalmente al máximo nivel. Lo he conseguido hacer bien y disfrutando, pasándolo bien y con gente a la que considero mis amigos. No se puede pedir más".
Para terminar, deseó el mejor cierre de temporada posible para el equipo, sin descartar otro título: "Ojalá. Yo estaría animando como el que más desde la distancia. Los jugadores que marcan la diferencia los tiene. Luego es la suerte de competir en el momento exacto, estar preparados para que salgan las cosas y aprovechar las oportunidades. Estaba llamado a hacer una gran temporada en LaLiga y la UEL antes del parón. No sé por qué va a ser ahora diferente. Ojalá se pueda dar".