Tras la conferencia, Monchi respondió a algunas preguntas de actualidad de los asistentes, como la actitud ante la pandemia: "Hay que reinventarse y buscar fórmulas que antes no existían o no pensabas que necesitaras. Cuando las cosas vienen mal hay dos caminos: agachar la cabeza y sentirse como una víctima, o bien buscar soluciones. Yo me quedé muy bloqueado porque siendo el director general deportivo, estás en medio de todo lo que rodea al equipo. Levantamos la cabeza para buscar soluciones, porque la vida no es un camino de rosas. Hemos tenido momentos muy complicados, pero el duelo no puede durar toda la vida. Hay que intentar las cosas y no quedarnos con la duda".
Además, se le preguntó por la Superliga y la importancia del aficionado en el fútbol: "El fútbol es pasión y es de los aficionados, porque es lo que hemos vivido siempre. Lógicamente ha habido una evolución y ahora la mayoría de clubes son sociedades anónimas. Pero perder de vista que aquí hay un cliente fundamental que es el aficionado, nos llevaría al fracaso. No podemos darle la espalda a lo que mueve al fútbol, que es la pasión. Yo soy más sevillista que director deportivo y no sé si eso es una ventaja o un inconveniente. Si yo me emociono después de ganarle a la Real Sociedad no es por pensar que vamos a ingresar más por la Champions, sino porque sé que vamos a hacer feliz a la gente. Ese es nuestro leitmotiv".
"Perder de vista al aficionado nos llevaría al fracaso. Si yo me emociono al ganar es porque hacemos feliz a la gente"
Por otro lado, quiso ser optimista a la vez que prudente sobre la vuelta del público a la grada: "Hay cierta información que habla de que posiblemente pueda haber algo de público en los dos últimos partidos de LaLiga. Esperemos que los contagios de esta cuarta ola no suban más y la situación se pueda estabilizar. El fútbol sin aficionados pierde su esencia. También es verdad que una de las cosas que más me ha llamado la atención es que el profesional ha sabido reinventarse y competir de la misma forma sin público, algo de lo que todos dudábamos al principio".
Por último, reflexionó sobre su tuit tras la victoria ante la Real Sociedad y la necesidad de dejar salir las emociones: "La vida quizá me está pasando muy rápido y no he podido disfrutar demasiado porque estoy obsesionado con el mañana. Le he quitado mucho tiempo a mi gente y a mí mismo por esa obsesión de buscar el detalle. Aquel tuit significaba que me dejaran un minuto ser yo mismo. Iba relacionado con la emoción del partido, de quitarse la máscara de director deportivo y ser Monchi, pero solo un minuto".
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