Alejandro Acejo compareció en los medios oficiales en la previa de su debut como entrenador del Sevilla Atlético. El malagueño, que se estrenará esta tarde ante el Albacete Balompié en el Estadio Jesús Navas, se refirió en primer lugar a la situación que se presentó del lunes al martes: "Los que estamos trabajando para la cantera estamos expuestos a este tipo de situaciones y llegó este cambio. Toca afrontarlo con todas las de la ley y aportar mi granito de arena, no es fácil para nadie, pero estoy con ganas y motivación para que el equipo vaya creciendo y le demos esas herramientas para que afrontemos cada partido con las máximas garantías de éxito". Al hilo de esto, indicó que "fue todo muy rápido y había que ponerse manos a la obra. Como hombre de club estoy a disposición y había que coger la situación con la máxima energía para darle a los chavales ese camino para seguir creciendo, que es el objetivo de todos".
Acerca del estado de la plantilla, uno de los factores que destacó Acejo es el conocimiento que tiene de la mayoría de ella: "Los jugadores están bien. Poco a poco van cogiendo nuestra idea de trabajo y la pequeña ventaja es que a la gran mayoría los conozco desde años atrás para poder avanzar en ese trabajo. Les transmito confianza y ese punto de energía positiva para que ellos se encuentren bien, el respaldo por parte de la dirección deportiva lo he tenido y lo único que puedo hacer es devolverlo con trabajo, dedicación y entrega. Estoy contento porque en todo el tiempo que llevo aquí he sentido ese calor".
Y ya a la hora de hablar del encuentro de esta tarde, dijo que "es un partido bonito. Esta nueva categoría es exigente y a la vez muy bonita para disfrutar, sobre todo cuando estemos fuera de la situación en la que estamos actualmente. Intentaremos hacer un buen trabajo dentro del campo y transmitir seguridad y tranquilidad a los jugadores, ya que no es más que un partido en el que tenemos que ejecutar nuestras armas para lograr tres puntos en casa que nos vendrían muy bien ante un rival preparado para intentar ese ascenso". En la misma línea, desgranó cuáles son las intenciones en este período: "Tenemos pocos días de trabajo, pero la idea es que lo que llevo trabajando salga y se dé en el campo y que poco a poco vayan cogiendo esa seña de identidad propia de nuestra cantera y también de mi parte. Vamos a buscar que lo antes posible se adapten a ella y creo que poco a poco la irán cogiendo, más pronto que tarde".
A nivel personal y para terminar, contento por contar en el cuerpo técnico con quien ha sido su mano derecha los últimos años, Juan Luis Redondo, el malagueño se refirió de nuevo a la situación que se le presenta: "Este escenario es cierto que a nadie le gusta, pero vamos a tratar de sacar lo mejor de cada jugador así como del equipo. En esa coctelera vamos a meter todas las herramientas y todos los contenidos posibles para llegar cada domingo con las máximas garantías, con el objetivo de afianzarnos bien y evitar situaciones que se estaban dando. Realmente no me parece un marrón, sino que soy un entrenador de la casa y la situación me ha tocado afrontarla a mí. Es una experiencia más en la que estamos inmersos y hay que pensar en trabajar, mirando qué es lo que necesitamos para mejorar y para hacerle daño a los rivales. Yo voy a trabajar lo máximo posible por el equipo y para que los chavales sigan creciendo, afrontando cada partido como si fuera el último".