Tal día como hoy, hace justamente cien años, el Sevilla FC conquistaba el primero de los títulos oficiales obtenidos a lo largo de sus casi 127 años de historia. La creación en 1915 de la Federación Novena de Clubes de Foot-Ball –actual Real Federación Andaluza de Fútbol– posibilitaba la organización del primer campeonato de carácter oficial en la región, cuya primera edición se celebró entre finales de 1915 y comienzos de 1916, resultando el Sevilla subcampeón tras caer en la final frente al Español FC de Cádiz por 2-1. La segunda edición, sin embargo, iba a suponer el inicio de un largo idilio del club blanquirrojo con el campeonato regional, llegando a alzarse con el triunfo en 18 de las 21 ediciones disputadas, algo que le valió el sobrenombre de Eterno Campeón de Andalucía.
Tras deshacerse de todos sus rivales en las eliminatorias provinciales previas, el Sevilla FC accedía a las semifinales como único represéntate hispalense, completando el cuadro el Español FC de Cádiz, el Malagueño FC y el Real Club Recreativo de Huelva. Una clara victoria por 3-1, el día 6 de enero de 1917, frente al club malagueño otorgaba al club sevillista el pase a la gran final, en la que se enfrentaría al Recreativo de Huelva, su viejo rival desde 1890, que previamente se había deshecho del Español de Cádiz por 3-1 en partido de desempate, tras finalizar el primer duelo con empate a dos.
La gran final se disputó el 14 de enero de 1917, a las tres de la tarde, en el Campo del Mercantil, situado en el Prado de San Sebastián, único campo de Andalucía vallado y con medidas reglamentarias en aquella época. Con un rotundo marcador de 4-0, merced a los tantos del mítico Spencer (2), Ramírez y Leconte, el Sevilla FC se proclamaba campeonísimo andaluz, obteniendo el primero de los 31 títulos oficiales que hoy adornan sus vitrinas.