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El Sevilla celebra el triunfo ante el FC Barcelona
Primer Equipo

FORTALEZA EN CASA Y MUCHO QUE MEJORAR FUERA

26/12/2015
Entradilla
Los 25 partidos oficiales disputados por el Sevilla se han saldado con 10 victorias, 5 empates y 10 derrotas, repartidas por igual entre Liga y Champions
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Luces y sombras en el Sevilla FC 15/16. De todo ha habido en los 25 partidos disputados con un balance agridulce de los nervionenses en lo que va de curso. Un año 2015, pleno de registros históricos durante el ejercicio anterior allá en el estío y que acaba con los deberes aún por hacer cuando asoma el invierno de 2016. En el recuerdo está la excepcional 14-15 que concluyó con el quinto título europeo (4º en la UEL) y un total de 60 citas oficiales, 49 invictas (39 victorias) y sólo 11 derrotas en total. Pero el fútbol es el hoy, y el reto de la campaña 15/16 debe ser acabar en esa misma línea y dejar atrás la irregularidad con la que se ha iniciado, ahormando de nuevo un equipo fiable y competitivo.

De los 10 triunfos del Sevilla, 9 han sido en Nervión y 1 en Las Gaunas

 Son ya 25 partidos oficiales disputados desde la tarde de Tiflis en la Supercopa de Europa ante el FC Barcelona, que dejó la miel en los labios de haber podido vivir un comienzo distinto. El balance global es de 10 victorias, 5 empates y 10 derrotas, a una sólo de las sufridas en todo el curso pasado. En la Liga, un diciembre alentador ha maquillado este mal inicio, sumando 6 victorias, 5 empates y 5 derrotas. En la Copa del Rey el trámite ante Logroñés aportó dos triunfos y las siete citas europeas añaden sólo dos victorias más, junto a las cinco derrotas, cuatro de ellas en el duro grupo de la Champions. Tras Tiflis, el segundo guiño de infortunio fue la inmerecida derrota en Manchester ante el City, también en el descuento, dando idea de que hay años en los que hay que sobreponerse a los aires adversos que marca el fútbol.

Dos guiños de infortunio, goles en el descuento en Tiflis y Manchester

Diciembre, mes para volver a soñar

Ha quedado claro que las buenas sensaciones de diciembre del equipo de Emery han ido al alza. Al menos en el parón navideño se ha logrado equilibrar victorias y derrotas, demasiadas a estas alturas del curso. Cinco derrotas fueron en Liga y otras tantas en el intratable grupo de la Champions. De total de diez triunfos, nueve fueron en casa: seis en el torneo doméstico, los dos ante el Borussia Monchengladbach y la Juventus, así como el copero ante el Logroñés, único equipo que ha visto ganar hasta ahora al Sevilla a domicilio. Los cinco empates fueron todos foráneos, raquíticos cinco puntos fuera hasta la fecha en ocho citas que saben a muy poco porque eran estadios donde el Sevilla debió dar un golpe en la mesa si el acierto hubiera sido otro. Un rendimiento insuficiente como bien ha reconocido el propio Unai Emery.

Sólo cinco puntos fuera de casa en campos propicios para ganar

Pese a todo sigue en tres competiciones

Los aspectos positivos de este anómalo inicio se centran en la fortaleza rescatada en Nervión, tras las dos primeras derrotas ligueras ante Atlético y Celta. Justo tres meses después de la segunda, el Sevilla se mantiene en tres competiciones, contando los de Emery todas sus comparecencias caseras por victorias desde aquel triunfo in extremis ante el Rayo, gracias a la recordada magistral falta directa de Konoplyanka que supuso el 3-2 final. Tras el mismo, cayeron en el Sánchez Pizjuán en Liga, Barça, Getafe, Madrid, Valencia y Sporting. Unido todo ello a los dos triunfos europeos citados y la vuelta de Copa, con un balance goleador desde entonces de 16 goles a favor y cinco en contra, racha positiva que ha ayudado a evocar a Nervión como el fortín de hace poco tiempo atrás.  

Desde hace tres meses el Sevilla sólo suma victorias en el Sánchez Pizjuán

Recuperación de la solidez defensiva

Otro aspecto positivo tiene que ver con la recuperación de la solidez defensiva, encajando un solo gol en los siete últimos partidos disputados, el de Riazor a balón parado. El escenario preocupante motivado por la plaga de lesiones -sobre todo las de larga duración de la ansiada dupla titular Pareja/Carriço- así como los reiterados desajustes defensivos, provocaron 35 goles encajados, 19 en Liga, 11 en la Champions y los 5 de la Supercopa. No obstante, el balance anotador es hasta ahora ligeramente favorable ya que a  los goles sufridos se contraponen 38 goles a favor, 21 en Liga, 12 en Europa y los 5 de Copa del Rey.

38 goles a favor y 35 en contra, balance goleador en 25 partidos

La producción goleadora del equipo está muy repartida entre las tres competiciones. Son 13 los jugadores que han visto puerta: Gameiro es el máximo artillero (9 tantos), le siguen Konoplyanka (5), Llorente y Banega (4 cada uno), Immobile (3), Krohn-Dehli, N’Zonzi, Coke, Iborra y Reyes (2 cada uno), más el logrado por Escudero en Liga ante el Valencia  que fueron tres puntos y los de Vitolo en Alemania y Tremoulinas ante el City que no sirvieron para puntuar. En el capítulo de asistencias, los más destacados son el ucraniano con cinco, el riojano y el danés con tres, así como dos más cada uno, de Banega, Vitolo, Iborra y Mariano.

Krychowiak, pilar indiscutible

Salvo en la Copa del Rey, el polaco Krychowiak se ha erigido en uno de los pilares, sino el que más, del actual Sevilla de Emery. Con 2.100’ minutos jugados, le siguen a distancia un Vitolo deseoso de marcar en Liga aunque trabajador a destajo con 1.778’ minutos, un Rico más asentado con 1.710’, Kolodzjiejczak (1.684’), Tremoulinas (1.639’), Coke (1.557’) o Rami (1.470’). Gameiro ha sido el delantero más utilizado por el técnico con 1.314’, seguido de Konoplyanka (1.218’), Banega (1.176’) e Iborra (1.151’). Los citados han sido los once hombres más titulares y los más usados por el vasco en estos 25 partidos oficiales.   

Krychowiak con 2.100’ minutos lidera el once más utilizado por Emery

La asignatura pendiente

Donde el Sevilla no ha dado la talla y debe empezar a hacer bien los deberes es en sus compromisos fuera de casa, donde la falta de efectividad y de confianza le ha privado de sumar una serie de puntos que -por trabajo y pelea- se había ganado en el terreno de juego. Así, los cinco empates firmados a domicilio, dos a cero (Málaga  y Betis) y tres a uno (Levante, Eibar y Deportivo) quedaron con la sensación de pleitos que debieron terminar en victorias, las cuales se fueron al limbo de los justos por desaplicaciones defensivas o claras ocasiones erradas por la falta de acierto ante el marco rival. Es pues la asignatura pendiente de estos primeros 25 partidos disputados. Materia que hay que empezar a saldar sí o sí en Granada el tercer día de 2016.