Comenzaba el partido en el Viejo Nervión con mucho viento y con el mismo respeto entre ambos equipos, que prácticamente hasta el minuto 17 no dejaban nada reseñable sobre el césped. Fue en este minuto cuando Yeboah agredía de manera incomprensible a Matos y dejaba a su equipo con un hombre menos de forma directa.
A pesar de contar con un jugador más en el terreno de juego, el Sevilla Atlético no encontraba la forma de hacerle daño al Real Oviedo, apenas con un leve disparo de Curro sobre la meta visitante. Y con el encuentro en un estado neutro, llegaba la genialidad de David Rocha, que transformaba una falta directa de manera magistral en la portería de Juan Soriano para darle la victoria a su equipo al borde del descanso.