El Sevilla FC sumó de nuevo de tres en casa, prolongando su excepcional racha como local. Ya son diez las victorias consecutivas en Liga en Nervión, donde el equipo de Unai Emery, hoy dirigido por Juan Carlos Carcedo, se impone por inercia. Lo hace en ocasiones, como esta mañana, sin alardes, con lo justo, que sin embargo es más que suficiente para imponerse al rival de turno. Ante el Levante, que en gran parte del segundo acto metió al Sevilla en su campo buscando la igualada, bastó con dos golpes certeros al comienzo de cada tiempo y una genialidad de Konoplyanka a quince del final. Una vez más, el Sevilla, en definitiva, lo hizo fácil al calor de su hinchada.
Hubo lógicos cambios en el once inicial con respecto al pasado jueves, algunos obligados, por sanción o lesión, y otros para repartir los esfuerzos. El Sevilla FC saltó al campo sin hasta cuatro fijos –Carriço, Banega, Krychowiak y Vitolo-, pero se mostró imperturbable. En casa este equipo goza de un punto de confianza extra que le hace ganar casi de memoria. Ante el Levante ni siquiera había transcurrido un minuto cuando ya iba por delante en el marcador, después de que Gameiro enchufara a la red un balón muerto dentro del área. El partido no se podía comenzar mejor y la sentencia la tuvo el equipo nervionense con varias oportunidades clarísimas de Gameiro, en las que Mariño le ganó la partida. No obstante, el Levante, después del sopapo inicial, se estiró y comenzó a mostrarse en ataque, apareciendo Mariano en varias ocasiones de forma providencial para evitar el empate.
En la primera parte las llegadas de los laterales fueron constantes