Imagen
Kolo pelea un balón
Primer Equipo

6-4: SI COMPITE ES MUY BUENO, PERO SI NO...

14/08/2015
Entradilla
El Sevilla, víctima de un arranque indolente, fue barrido en la primera hora y se llegó a ver con un sonrojante 6-0 en contra, pero al final se animó a competir, marcó cuatro goles y murió arriba
Cuerpo Superior

El de esta noche era un escenario de esos que invitan a lucirse, tanto por el campo como por el rival que había en frente. Pero el Sevilla llegó tarde al encuentro, muy superado en la primera hora de juego por la motivación de una Roma que fue quien compitió de verdad hasta que a media hora del final despertaran los hombres de Unai Emery. El Sevilla pasó de lo peor a lo mejor, dando pie a un rocambolesco resultado de 6-4 en contra, que deja una reflexión inapelable: si no se juega con los cinco sentidos y al cien por cien te ponen la cara colorada, sobre todo si el que está en frente es un equipo de nivel Champions. Pero si este equipo pone de su parte, siempre va a tener mucho más ganado que perdido, como evidenció en el tramo final del extraño partido que se vio en Roma.
 

Cuerpo Inferior

Unai Emery sacó un once con hasta ocho cambios con respecto al pasado martes en Tiflis. Tan sólo repitieron Krohn-Dehli , Banega y Ramí, los dos primeros jugando en el doble pivote, quedándose Denis en la mediapunta. Había ilusión e incluso expectación por ver al Sevilla competir en una cita de este calibre, sobre todo después de la versión épica que exhibió ante el Barça. Pero poco se vio en la primera parte en el Olímpico de Roma más que un equipo errante en mano de una Roma que, valiéndose de su mayor motivación, impuso una enorme diferencia en el juego y marcador. El comienzo del choque fue premonitorio de lo que pasaría hasta el descanso. En el tercer minuto Dzeko hacía el 1-0, tras colarse como quiso entre los dos centrales. Casi sin tiempo para sacudirse del primer golpe, Korosidis tomó para sí el pasillo interior sin encontrar oposición y de un derechazo seco y raso hizo el segundo. El Sevilla despertó por fin, sobre todo Inmobile, que con una potente arrancada por la izquierda se plantó solo ante Szczesny y por muy poco no logró acortar distancias. El equipo de Unai se lo creyó, adelantó la presión y robó varios balones en el balcón del área, sobre todo gracias a Denis, con los que pudo haberse metido en el partido. Pero esta no era la noche de los nervionenses y en el 41, una mala salida desde atrás, acabó en gol de Dzeko a placer. Antes del descanso, otro fallo sacando la pelota en defensa, acabó en gol de Nainggolan. 4-0 y un durísimo correctivo para digerir en el vestuario.
 
Unai hizo un doble cambio en el intermedio, sacando a Cristóforo e Iborra por Banega y Krohn-Dehli, con el fin de reforzar la medular y dar más consistencia. Más allá de los movimientos de Inmobile, que se estrellaba con el palo al poco de comenzar el segundo acto, y la constancia de Denis, la Roma siguió golpeando, aprovechándose de la tibieza atrás de los nervionenses. Salah hizo el quinto y Totti, que acababa de salir, el sexto de penalti.
Emery continuó intercambiando piezas para repartir minutos y Denis encontró premio a su insistencia, marcando el que se presuponía como gol del honor.
 
Pero con el tanto del gallego el Sevilla se vino arriba, sobra todo con la presencia de Reyes, Gameiro y Vitolo, los últimos en salir. Reyes hizo el egundo, empujando un tierno y magnífico servicio desde la derecha de Gameiro. El Sevilla embotelló a la Roma y Coke hizo el tercero a siete del final después de una nueva acción individual de Denis Suárez, sin duda el mejor en el Olímpico. Pese al resultado aún escandaloso, el equipo, con varias marchas más que las puestas durante gran parte del juego, salvaba su imagen y de hecho Denis lograba el cuarto gol, haciendo buena una jugada de estrategia marca de la casa. El Sevilla murió en el área romanista e incluso rozó el quinto en la última jugada del choque, con un remate de Tremoulinas a bocajarro que se fue a las nubes. El choque terminó con ese extraño 6-4 que refleja lo que puede ocurrir cuando el equipo de Unai muestra sus dos caras en el sentido más radical.
 
Por el Sevilla FC jugaron Sergio Rico, Mariano, Rami, Kolo, Escudero, Banega (Cristóforo m.45), Krohn-Dehli (Iborra m.45), Kakuta, Denis Suárez, Konoplyanka e Inmmobile. En el descanso salieron Cristóforo e Iborra y a lo largo de la segunda parte Luismi, Tremoulinas, Coke, Reyes, Vitolo y Gameiro.