Es el último en llegar y aunque acumula ya varios entrenamientos, aún no se le ha podido ver competir como sevillista. Guilherme Arana pasó este jueves por el plató de A Balón Parado, donde Roberto Arrocha quiso descubrir al futbolista pero sobre todo a la persona. Eso sí, la primera pregunta era obligada, sobre el trabajado triunfo copero en el Wanda: "Fue un gran partido. El equipo estaba algo tocado por las últimas derrotas, pero esa victoria ha sido muy importante para el ánimo".
A partir de ahí, Arana fue repasando su carrera futbolística en Brasil hasta pararse en los últimos meses, en los que se terminó de gestar su salto a Europa: "El Sevilla venía hablando conmigo y se interesó por mí. Hablé con mi familia y tomamos la decisión. Óscar Arias viajó a Brasil y me dio tranquilidad para venir, sabiendo que jugadores como Alves, Renato o Luis Fabiano han pasado por aquí. Es verdad que en verano hubo un acercamiento, pero estábamos en mitad del campeonato y era difícil salir. El Sevilla volvió a por mí y estoy feliz de llegar quí tras conseguir el título con Corinthians".
Aunque aún no ha podido palpar la competición en sí, el carrilero ya sabe lo que se va a encontrar: "Las diferencias que he notado en los entrenamientos son que el fútbol aquí es más rápido y de mayor intensidad. En Brasil es un poco más lento, pero me gusta más este ritmo, porque hay que tocar y pasar todo el rato".