DAVID SORIA: "LAS LÁGRIMAS ERAN DE IMPOTENCIA, QUERÍA QUE ME VENDARAN Y SEGUIR"

No ha sido el mejor estreno liguero para David Soria. El meta madrileño contó con la confianza de Berizzo para salir de inicio ante el Espanyol, pero en la primera llegada al área del equipo catalán, una acción desafortunada le obligó a marcharse al vestuario:  "Nunca es un buen momento para lesionarse, así que agradezco mucho las muestras de cariño que me ha mostrado la afición en estas últimas horas. Es una acción rápida, en la que uno no piensa y mete la mano donde había que meterla. Ahora ya no queda otra que recuperarse".

No pudo evitar derramar alguna que otra lágrima, tanto en el propio césped como en el banquillo: "No tenía dolor, porque con la adrenalina del momento y una vez que el doctor me colocó el dedo, lo que tenía era impotencia. Después de un año malo, que te llegue la oportunidad de estar ahí y lesionarte en la primera jugada es duro. Yo quería que me vendaran y seguir, pero el doctor vio que la situación del dedo no era buena y el cambio era lo mejor".

"Uno no piensa y mete la mano donde había que meterla"

Por suerte, el fin de semana de selecciones dentro de 14 días le permitirá perderse menos competición si cabe: "Agradezco la confianza del míster, que cuenta conmigo como uno más para demostrar que puedo estar ahí. Ahora tengo que aprovechar también el parón de selecciones para volver más fuerte, porque a nivel físico no voy a perder nada".

Por último, se refirió a cómo afronta el equipo el partido de mañana ante el Istanbul Basaksehir, duelo que lógicamente deberá seguir desde fuera: "El equipo está bien, con ilusión y confianza. El otro día se pudo ganar pero no salieron bien las cosas. Mi cambio también influyó porque en el momento de la temporada en el que estamos, es complicado quedarte sin un cambio tn pronto, pero creo que estamos bien para conseguir el pase".