EL MÉTODO SAMPAOLI SE PONE A PRUEBA EN CASA DE UN RIVAL DIRECTO

Después de una temporada de Liga completa sin conocer la victoria como visitante, el Sevilla FC, ahora bajo el mando de Jorge Sampaoli, se estrena fuera de casa en El Madrigal con el doble reto de continuar sumando de tres y zanjar una racha negativa a domicilio tan dilatada como difícil de explicar.

Es el de este domingo uno de esos partidos marcado en rojo en el calendario, porque el Villarreal es a priori un rival directo por el objetivo europeo. Ganar al conjunto de Fran Escribá además de puntos aporta autoestima, que es precisamente lo que necesita seguir adquiriendo un grupo que el pasado sábado demostró lo mucho y bueno que es capaz de hacer a poco que consiga asentar los nuevos conceptos y estilo de juego que está implementando Sampaoli. 

El Madrigal es un escenario de altura para calibrar la idea de Sampaoli

Hay expectación por ver la respuesta de la propuesta ofensiva de Jorge Sampaoli en un campo donde no siempre es fácil tomar el dominio y hacerse con el protagonismo. Es en estadios como en El Madrigal donde se puede calibrar hasta qué punto las ideas del técnico argentino pueden trasladarse al campo de juego. Que el Sevilla va a salir a mandar es algo esperable, pero el logro será  conseguirlo ante un contrario que en su estadio mantiene una enorme solidez.

No obstante, no aguarda el Villarreal en su mejor momento, al menos en lo anímico, tras caer eliminado ante el Mónaco en la fase previa de la Liga de Campeones. Como bien dijo Vietto en esta semana previa al choque, el Sevilla tiene que aprovechar el momento de un equipo que emocionalmente puede estar tocado. Sin embargo, en ocasiones estos reveses generan precisamente el efecto contrario y después de una gran decepción llega una actuación redonda para resarcirse del mal trago.

La propuesta de jugar con dos puntas salió bien y podría tener continuidad

El once y la disposición táctica del Sevilla es toda una incógnita, porque todavía el equipo está en fase de construcción. Parece que con dos puntas el rendimiento se optimiza arriba, de modo que no sería extraño que Sampaoli le diera continuidad a lo que salió bien contra el Espanyol. Pero en el debe de aquel encuentro el equipo tiene el grave desajuste defensivo que exhibió en la primera mitad, cuando cada fallo en el pase costaba un gol, sufriendo el Sevilla embestidas de los barceloneses siempre en inferioridad numérica. Es en esta parcela, en la retaguardia, donde se espera y debe haber ajustes para que la consistencia no se vea comprometida, con independencia de que la atractiva  propuesta netamente ofensiva que propugna este equipo siempre conllevará riesgos.