Ramón Rodríguez Verdejo 'Monchi' vivió un día especial en su regreso como nuevo director general deportivo de la entidad: "Evidentemente es un día extraño, un día difícil de imaginar y que es complicado explicar con palabras. Posiblemente yo lo deseaba lo antes posible y afortunadamente lo está haciendo hoy. Agradecer al presidente, Consejo, director general y a los que han contribuido para que esté hoy aquí y pueda volver a mi casa. Retrocediendo mucho en el tiempo, acordarme de Roberto Alés porque si hoy estoy aquí es en parte por su culpa. El presidente lo ha dicho perfectamente, hoy estoy aquí no por ser sevillista que lo soy pero los hay muchos y más que yo. No para salvarle el culo a nadie ni porque el club tenga un problema, porque es saneado, modélico y envidiado en el mundo. En las conversaciones de estos últimos días me han transmitido una idea que coincide mucho con lo que yo creo que tiene que ser el Sevilla del futuro. José María Cruz me dijo que querían que volviera para ayudar a crecer y dos años después creo que he aprendido, he crecido y tengo el derecho y el deber de reinvertir todo eso en el club al que quiero".
MONCHI: "ESTOY AQUÍ PORQUE ME HAN TRANSMITIDO UNA IDEA DE SEVILLA FC QUE COINCIDE CON LA MÍA"
Necesitó salir hace dos años, pero ahora está convencido de su regreso: "Vengo convencido de que hay mucho trabajo por hacer, de que muchas cosas buenas se han hecho y que puedo aportar en ese crecimiento sostenido. La última vez duré 18 años. No sé si otros 18, pero vengo con la ilusión de estar el máximo tiempo posible y no tengo otra cosa en la cabeza. Vengo a contribuir a un Sevilla que siga creciendo y se pueda codear con la élite para estar donde se pelean los éxitos. Ser campeón o no depende de matices que a veces no se pueden controlar, pero siempre será más fácil si estás más cerca de donde se cuece el éxito".
No entra Monchi en la decisión sobre Machín y no se quiere precipitar en cuanto a las renovaciones pendientes: "En lo deportivo acabo de llegar y de hecho realmente hasta el 1 de abril no empiezo a ejercer. Antes de opinar debo conocer y sería absurdo hablar lo que todo el mundo quiere escuchar. Veré y hablaré y luego tomaré las mejores decisiones para la entidad. En cuanto a Machín creo que el club ha actuado como debía actuar, más allá de esperar o no a Monchi. No puedo opinar en un tema en el que no tengo nada que ver. Lo decidieron las personas indicadas".
"Antes de opinar sobre las renovaciones debo conocer la situación y luego tomar las decisiones"
No cree el de San Fernando que la implicación de los grandes accionistas denote una venta próxima: "En las conversaciones que he tenido con el presidente y algún gran accionista sólo he percibido ilusión por el futuro y proyectos a largo plazo en el estadio y la ciudad deportiva. Cosas que a mí me gusta oír y los he visto ilusionados e involucrados. No he tenido la sensación de que vayan a vender sus acciones. En cualquier caso no soy adivino, pero sólo puedo decir para tranquilizar a la gente como Monchi sevillista, es que ellos también lo son. Si tienen que tomar una decisión, lo que les pido es que lo hagan pensando como sevillistas. Estoy tranquilo por lo que he escuchado y por lo que me han contado".
No se plantea un cambio en el banquillo sin saber qué ocurrirá de aquí a mayo: "El entrenador es Joaquín Caparrós y lo único que quiero es ponerme a su lado, que me vea como una herramienta más para el día a día y es lo más cercano. Lo que tenga que venir vendrá y a día de hoy hay un magnífico entrenador. Son 500 partidos en Primera y experiencia tiene. Con Joaquín he hablado dos veces y tendré que escuchar su idea, pero sería absurdo descartar la opción porque tiene lo más importante para ser entrenador del Sevilla, que es serlo ahora mismo".
Reconoce que no se fue en su día por nadie y volvió a explicar los motivos: "Ha habido muchas leyendas urbanas. Yo no me fui por enemistad con nadie porque hoy están los mismos. Si he venido es porque eso no era verdad. Yo me fui y es bueno que lo explique una vez más, porque creí que era el momento ya que me estaba quedando anquilosado. Necesitaba motivaciones externas para seguir creciendo. 18 años haciendo lo mismo te hacen creer que esto es el centro del mundo y hace falta conocer otras cosas. Eso es lo que me animó a salir. Busqué un lugar difícil porque en ese momento había muchas opciones y elegí un lugar en el que más allá de los resultados, lo he conseguido. Ahora he tenido que valorar al Sevilla con otras opciones. A nivel deportivo me convencía más al lado de otros que pueden sonar más. Yo era sevillista en Roma y trabajaba 24 horas para la Roma. Ahora seguiré siendo sevillista y trabajaré 24 horas para el Sevilla".
"No me fui por enemistad con nadie porque hoy están los mismos. Creí que era el momento porque me estaba anquilosando"
La exigencia ahora será mayor que en la primera etapa, pero eso lo sabe bien Monchi: "Es difícil estar al margen de las expectativas creadas y es lógico saberlo porque te das cuenta. Sé que mi llegada se puede relacionar con una presión mayor en los objetivos planteados, pero es algo que también he valorado. Hay mucha gente fuera de Sevilla que me han dicho que me equivoco volviendo, que las segundas partes nunca fueron buenas. Pero todo lo he puesto en la balanza y quiero estar aquí. Mi amigo Víctor Orta me ha dicho que diga que El Padrino 2 fue mejor que la primera. Sé que la presión y las miras van a estar sobre mí pero no me asusta la presión. Si en Roma hay algo es presión, así que en ese crecimiento de estos años también está eso".
Aunque con su marcha dejó el listón muy alto, cree que seguir hacia arriba es planteable: "Imposible no es nada y cosas más raras se han visto. Sin pecar de presuntuoso, el techo del Sevilla no tiene porque estar aún cercano. Es verdad y lo hablaba con muchos de los que trabajaban conmigo antes de irme, que el Sevilla allá por 2003 empezó a construir una estructura deportiva que cogió con el pie cambiado al resto. Fue donde se basó el éxito que acabó llegando y mucha gente aprendió de lo que hizo el Sevilla. Esa ventaja inicial se ha acortado y hoy por suerte hay más igualdad. Yo aspiro a dar otro salto. Con lo que hay y lo que he aprendido, para seguir creciendo y marcar la diferencia. Cada vez es más difícil ser distintos pero hay margen para crecer. Prometer títulos no es mi estilo, pero sí crecimiento en todos los aspectos deportivos".
También habló de las primeras conversaciones y de la afición: "Cuando el presidente me llamó por primera vez al poco tiempo de anunciarse mi rescisión bilateral con la Roma, lo que yo quería era saber qué querían de mí. Lo que me dijeron me gustó y eso era una base para construir lo futuro, porque si no me hubiese gustado no estaría aquí hoy. Al aficionado en primer lugar gracias, porque es difícil sentirse tan querido como yo en estos dos últimos días. Ellos saben que dedicación no va a faltar y les pido que se olviden de otras cosas y no miren atrás. Uno de los motores históricos de la entidad es la afición y ojalá lo siga siendo".
"Lo primero que le pregunté al presidente es qué querían de mí. Lo que me dijeron me gustó y eso ya era una base"
También había prensa italiana, que le preguntó por su anterior etapa: "Los dos años que he vivido en Roma no los cambio. Volvería a firmar sabiendo lo que ha pasado, pero cometí un error de novato y habría necesitado conocer mejor la situación del club. Pero no me arrepiento de nada porque me ha servido para crecer a nivel personal y profesional y conocer un club que, tras el Sevilla y el San Fernando, lo querré siempre". El nuevo sevilla de Monchi explorará vías distintas: "Creo que los objetivos deportivos llegan cuando las estructuras están preparadas para abordarlos. El Sevilla se ha instalado ya en la élite y el límite debe ser ambicioso porque será más fácil llegar. Lo importante es consolidar el club en la élite y ser vanguardista en ser situaciones que no están hoy desarrolladas en el fútbol. El presidente ha dicho que el Sevilla va a invertir en muchas cosas y eso también debéis comprarlo. El club invierte en crecer y eso es importante".
También dio el León su visión como sevillista en la lejanía: "Lo he sufrido y lo he gozado también. Llegar a cuartos de final de la Champions que nunca lo conseguí, eliminar al United, jugar una final de Copa... No se ha alejado mucho al Sevilla que yo tuve. Lo viví desde la lejanía pero con la cercanía que te da compartir la misma pasión". Además, negó que se hayan previsto regresos de anteriores integrantes de su equipo: "Con Miguel Ángel Gómez hablé ayer cuando remontaron ante el Eibar. Hoy en día es rival y el día 7 jugamos contra ellos. Yo debo conocer lo que hay aquí y ver si mis ideas de futuro coinciden con la gente que está ahora trabajando. Si es así, mejor. Vengo con el folio en blanco y con ganas de saber lo que se estaba haciendo para aportar".
No negó que el Arsenal de Emery ha llamado a su puerta: "Agradezco ese interés y el de otros clubes que han llamado, pero he valorado en la justa medida todas las propuestas y he aceptado la del Sevilla, que era la que reunía más condicionantes para aceptarla". Pronto llegará el duelo de rivalidad: "Tenemos un derbi el día 13 y no creo que yo pueda aportar mucho en el campo, aunque intentaremos transmitir junto al resto que los derbis se ganan con el corazón y sobre todo también con la cabeza. Ojalá pueda mantener los números de los derbis pasados".
"Agradezco el interés del Arsenal y de otros, pero la oferta del Sevilla era la que reunía más condiciones para aceptarla"
Si el Sevilla creció fue con las ventas y Monchi volvió a defender ese sistema: "La venta de jugadores en la época anterior era una necesidad para crear un proyecto. Vendíamos para crecer y tener una plantilla por encima de lo que nos permitían los ingresos ordinarios. No hay que tener miedo aunque la necesidad sea menor porque nos ha hecho crecer. Todo el mundo vende y es cuestión de valorar y decidir. La fortuna es que la buena gestión ha continuado y es un club saneado pero con limitaciones evidentes. Para seguir gastando lo mismo en la plantilla, vender es una posibilidad y está ahí". Para terminar, una reflexión: "Hay muchos mensajes que me han llegado, así como llamadas y gente que me ha visto por la calle. En este mundo donde ser feliz es cada vez más difícil con los problemas que hay en el día a día, si yo he conseguido hacer feliz a alguien me quedo con eso".