Se suele decir que jugar tres veces consecutivas ante el mismo equipo es un importante ejercicio mental para los dos contendientes, pues resulta muy difícil superar en tantas ocasiones a un mismo rival que te ha tenido enfrente durante tantos minutos. Sin embargo, el siempre caprichoso azar ha querido que el Athletic Club y el Sevilla FC condimenten su encuentro liguero para cerrar la primera vuelta en LaLiga Santander con dos choques coperos correspondientes a los octavos de final. Como quiera que el inicialmente previsto tenía como escenario la capital bilbaína, serán los sevillistas los que pierdan la localía de este triple duelo, al albergar únicamente el tercero y último dentro de una semana en Nervión.
Un Athletic históricamente nada propicio para los sevillistas en torneos de eliminatorias, pues únicamente en dos ocasiones ha conseguido salir airoso el Sevilla ante el equipo vasco. Curiosamente, eso sí, en ambos casos acabó ganando un título, tanto la Copa del Rey de 1948 como la Europa League de 2016. Dado que el equipo ya no volverá a casa hasta la disputa el domingo del segundo asalto, Pablo Machín se lleva nada menos que a 23 futbolistas, incluidos el meta del filial Lucho García y a Maxime Gonalons, que continúa con su recuperación para volver a ser de la partida lo antes posible.
Los de Machín aspiran a superar al Athletic en un cruce por tercera vez en la historia
Con respecto al pasado domingo, Pablo Machín recupera tras sanción a Franco Vázquez y a Mercado, aunque el primero de ellos volverá a ser baja el domingo y se unirá a la ausencia de Carriço, que vio la quinta amarilla contra el Atlético de Madrid. El soriano, que volvió a ser preguntado por los refuerzos en el mercado de invierno, sigue esperando a que fructifiquen esas llegadas para reforzar una plantilla que lógicamente nota la exigencia de mantenerse en lo más alto y tener ahora que afrontar la parte más exigente de una nueva competición.
El equipo vasco, por su parte, encara esta cita en un estado anímico óptimo tras la victoria del lunes en Balaídos. Los tres puntos sumados frente al Celta han sacado a los de Gaizka Garitano de los puestos de descenso después de cinco jornadas y les han liberado de buena parte de la enorme presión que pesaba sobre el grupo. El claro objetivo del Athletic esta temporada sigue siendo la permanencia, pero la Copa siempre ilusiona en Bilbao. Es por ello que el torneo del KO puede convertirse en válvula de escape para un equipo y una afición necesitada de alegrías a pesar del importante coste físico que puede suponer para la plantilla.
El Athletic viene de ganar en Balaídos y salir del descenso después de cinco jornadas
Se espera por ello que Garitano refresque el once respecto al que alineó en Vigo con algunos de los suplentes en el último encuentro o futbolistas habitualmente titulares que no pudieron actuar frente al Celta por sanción, como Yeray Álvarez o Raúl García. Las únicas bajas seguras del Athletic para recibir al Sevilla en este envite copero son las de los lesionados Iñigo Lekue y Mikel Rico, mientras que es duda Dani García. El centrocampista, al igual que Williams, tuvo que ser sustituido en Vigo por una sobrecarga muscular.