El Sevilla FC jugó este pasado martes ante el NK Maribor su décimo partido oficial de una temporada en la que el equipo de Eduardo Berizzo ha arrancado con mucha fuerza. El conjunto nervionense puede presumir de un balance de seis victorias, tres empates y una única derrota, con 15 goles a favor y 8 en contra, habiendo dejado la portería a cero hasta en seis partidos.
Estos excepcionales números se traducen en una tercera plaza en el campeonato de Liga -con la misma puntuación que en la histórica 14/15 y dios puntos más que los sumados a estas alturas en el pasado curso- y el liderato en el grupo E de Liga de Campeones, tras haber sacado un punto en el histórico campo de Anfield y haber derrotado con mucha superioridad al Maribor.
El arranque del Sevilla FC cobra especial mérito si se tiene en cuenta que en estos diez primeros partidos Eduardo Berizzo ha dosificado considerablemente los esfuerzos. Sólo Sergio Rico ha jugado los 10 partidos y únicamente 9 jugadores sumán más de 450 de los 900 minutos disputados por el equipo en lo que va de competición.
Destaca, en este sentido, el hecho de que sólo tres jugadores, Sergio Rico (895), Nzonzi (793) y Lenglet (674), superan la barrera de 650 minutos y sólo siete –los tres anteriores, Navas (637), Escudero (630), Mercado (612) y Wissam Ben Yedder (601)- sobrepasan los 600. Otro dato que da realce al reparto de protagonismo es que hasta 17 jugadores han jugado cinco o más partidos, cifra que por ejemplo no alcanzan ni Kjaer (cuatro partidos) ni Franco Vázquez (cuatro partidos), dos hombres a priori llamados a ser de la partida, que sin embargo se han visto limitados en este inicio por las lesiones.