El Sevilla Atlético ha terminado de dejar claro que sigue sin encontrar su techo en la presente temporada. Tocaba este domingo abrir la segunda vuelta y enfrente estaba todo un UCAM Murcia, equipo hecho para ascender y que para más inri firmaba los mejores números a domicilio de toda la Segunda B. En cinco precedentes, nunca había logrado vencer el filial a los universitarios, pero este equipo no sabe de estadísticas y si de ganar partidos. La segunda plaza ya es un hecho.
Ya a los tres minutos avisó el siempre incisivo Matos, cuyo centro desde la izquierda estuvo a punto de cazarlo Carlos Fernández. Poco después era Ivi el que no conseguía sacar partido a una espectacular dejada de cuchara de Borja, mientras el UCAM intentaba quitarse la presión de encima. Lo fue consiguiendo poco a poco, pero en todo el partido únicamente se le contabilizó una ocasión de peligro. Iván Aguilar, desde la frontal, probó a un José Antonio que envió a córner a una mano con elegancia. Antes del descanso, Carlos Fernández volvió a probar al meta Buba, sin duda el mejor de los visitantes, con un disparo raso.