2-0: OPORTUNIDAD PERDIDA EN GETAFE

Era un día para dar un salto importante en la clasificación y el Sevilla FC no lo ha podido aprovechar. Dolorosa derrota en el Coliseum Alfonso Pérez ante un Getafe que sacó rédito de los errores nervionenses para llevarse tres puntos en la segunda parte. Nada más volver de los vestuarios, Munir le hacía el primero a sus ex-compañeros y ahí los de Quique Sánchez Flores supieron manejar la situación, aunque el Sevilla tuvo minutos de dominio sin crear el necesario peligro. Ya en el alargue, con todos buscando el empate a la desesperada, Ünal le daba carpetazo al encuentro culiminando una contra que deja muy tocados a los de Jorge Sampaoli. Además, sin capacidad para reponerse cuanto antes de la situación, pues no será hasta dentro de 14 días cuando toque volver a afrontar una nueva salida de seis puntos en Cádiz, el próximo Sábado de Pasión.

No habían transcurrido ni diez segundos cuando tocó empezar a sufrir, con un balón atrás para Bono, que presionado por Ünal, intentó un regate dentro de su área. Gudelj, muy atento, acudió al rescate y fue objeto de falta para que terminase la acción. El partido llevaba en el guion la intensidad y así fue desde el arranque, con dos equipos que, en la dificultad clasificatoria, intentaban hacerse fuertes atrás. Quizás la jugada mejor combinada en ataque de los sevillistas en todo el primer tiempo, Bryan galopó por la izquierda y encaró su disparo, raso y cruzado, para obligar a la estirada de David Soria junto al palo. Fue de los pocos acercamientos de toda una primera parte muy cerrada, mientras el Getafe intentaba aprovechar alguna mala entrega sevillista para atacar con espacios. Así llegó, ya a diez del descanso, una clarísima de Munir, que llegó solo tras el pase al hueco de Ünal, pero no encontró la portería con un tiro que se fue demasiado cruzado.

Munir ya avisó en la primera parte con un mano a mano que se le fue desviado

Hasta ahí las opciones ofensivas azulonas hasta el descanso, con un Sevilla que comenzó a controlar algo mejor la situación y que tuvo otra clara en las botas de Joan Jordán, que buscó la escuadra desde la frontal tras un pase horizontal de Navas. El balón, por desgracia, salió mínimamente alejado de la cruceta. Otra vez desde la derecha, el flanco más utilizado por los de Sampaoli, el capitán volvió a meter un centro con mucho veneno cuando restaban apenas cinco minutos, pero tocó un zaguero madrileño evitando cualquier intento de remate. Así se iba el partido al intermedio, con la igualdad inicial y una necesidad mutua que se dejaba notar casi en cada acción del encuentro. Y un partido fuera más, tocaba lamentar demasiado un error en la reanudación del choque. Solo habían transcurrido cinco minutos de la segunda parte y una inofensiva salida en corto acabó con una mala entrega atrás que cazó Mayoral. Con toda la zaga descolocada, aparecía Munir por la izquierda para batir abajo a Bono y poner el partido de cara para los de casa.

No terminó de reaccionar el equipo tras el primer gol azulón

Aprovechó la inercia del gol el Getafe para irse arriba y seguir inquietando, pero el que pudo responder fue Ocampos, antes de la hora de partido, con una media chilena que salió más cerca del poste de lo que, posiblemente, pensaba Soria, que la dejó salir con excesiva tranquilidad. Fue poco a poco recomponiéndose el Sevilla, que mejoró con la entrada de hasta tres jugadores de una tacada, sobre todo En-Nesyri, que saltó al campo junto a Suso y Rakitic. En esa franja tuvo sus opciones el Sevilla, con un disparo lejano de Telles y sobre todo, un centro de Navas con mucha intención al que llegó demasiado tarde En-Nesyri, que remató a las nubes. Antes, Ünal había probado a balón parado pero Bono salvó el bote para acabar despejando. Ganó metros el Sevilla ante un Getafe que tenía un botín demasiado poderoso en las manos y así llegaron disparos lejanos de Rakitic y sobre todo Gueye, este sí con la potencia necesaria para inquietar a David Soria, pero demasiado centrado.

Había espacios en campo sevillista y a punto estuvo de aprovecharlos Jaime Mata, que cabeceó dentro del área para obligar a Bono a despejar de forma acrobática pero efectiva. Cinco minutos alargó Mateu Lahoz, pero el alargue no contó con ocasiones para lograr las tablas, más allá de un tiro desviado y a la desesperada de Jesús Navas. Para hacerlo todavía más hiriente y en una contra en la última acción del partido, Enes Ünal certificaba la derrota y le daba la diferencia de goles particular a los madrileños. Doloroso cierre a esta nueva fase de la temporada, la previa al parón de marzo, y en la que el equipo no consigue aprovechar los resultados de la jornada para seguir alejándose de la quema. Seguirá a solo dos puntos del antepenúltimo puesto a la espera de que, el Sábado de Pasión, llegue una nueva final en Cádiz ante otro rival directo.