Cuerpo Superior
Era imposible errar una oportunidad así por lo mucho que había en juego. Ivan Rakitic tomó la responsabilidad y engañó a Ledesma con una tranquilidad que haría hasta dudar de la importancia de ese lanzamiento. La grada había visto un gran partido de su equipo pero faltaba el gol que desequilibrara la balanza. Y conscientes de lo que suponía ver entrar ese balón, la afición sevillista cantó como nunca el decisivo gol de Ivan. Así sonó y así fue celebrado en la narración de Sevilla FC Radio.