El 30º Málaga CF-Sevilla FC del presente siglo se ofrece pujante en el estadio de La Rosaleda con muchos alicientes en juego. Los de Sampaoli necesitan dar otro paso fundamental para seguir peleando la tercera plaza de LaLiga y los de Míchel reforzar su recuperada confianza ante su público ya que, tras dos primeras derrotas caseras ante Alavés (1-2) y Atlético (0-2), firmaron dos victorias de mucho peso ante Barcelona (2-0) y Valencia (2-0), sobre todo la primera ante el Barça de Messi. En ambos casos, marcó Sandro, goleador en racha que ha marcado 5 goles en las últimas cuatro victorias malagueñas. Pero, junto al acicate sevillista de lograr su sexta cita liguera sin perder ante los costasoleños, la altura de miras añade el reto de asentarse en zona Champions por tercer año consecutivo, esta vez vía Liga, hito histórico nunca vivido por la entidad nervionense.
Momento de revalidar al Sevilla ambicioso que mira alto, con la convicción de ser élite, reto a valorar pese a ser ya habitual
El pleito de este lunes festivo encierra muchos mensajes. Ante uno de los rivales siempre motivado cuando se enfrenta al Sevilla, los nervionenses no sólo van con la consigna de pelear la victoria e intentar hasta el final el premio de la 3ª plaza, de ahí la trascendencia del partido. Se vislumbra también algo más. Y es la convicción de certificar una posición relevante en la élite, con altura de miras hacia adelante y nunca hacia atrás. Desafío exigente que, pese a ser usual en el club de Nervión, conviene valorar en sus justos términos. Es momento pues de revalidar un Sevilla ambicioso que afronta cuatro finales, la primera de ellas este 1º de mayo.