Tras el arrebatador arranque en casa ante el Rayo Vallecano y con los últimos coletazos del mercado aún influyendo en todos los equipos, el Sevilla FC afronta esta tarde su último compromiso previo al primer parón liguero de la temporada. Lo hace nuevamente a domicilio tras la victoria in extremis del pasado lunes en Getafe y defendiendo un liderato tan anecdótico como reconfortante, ya que con tantos ajustes todavía pendientes y una plantilla en la que podrían cambiar algunas piezas, la maquinaria de Julen Lopetegui parece ya de lo más engrasada. Y todo ello en uno de los cinco estadios de los que nada pudo sacar la temporada pasada.
Lo ha venido repitiendo el técnico vasco prácticamente desde que se pitó el final en el Coliseum Alfonso Pérez y también en la rueda de prensa de este viernes. Lopetegui reconoce que el Elche ganó la cita de la temporada pasada y que "nos ganó bien", por lo que no se fía ni lo más mínimo de una plantilla que, según el propio entrenador, "ha mejorado en todos los aspectos, incluido en jugadores". Sin ir más lejos, Lopetegui puso el acento en las incorporaciones en los últimos días tanto de Darío Benedetto como de Omar Mascarell, así como en la recuperación de Piatti. Pedro Bigas, que podría entrar en la línea de tres centrales que viene utilizando el técnico ilicitano esta temporada, también está ya disponible.
Fran Escribá recupera para este partido a Piatti y Bigas
Lopetegui, por su parte, no ha ofrecido la lista de convocados y está a la espera de que se resuelvan los temas burocráticos para que el último en llegar, Thomas Delaney, pueda entrar entre los disponibles. Eso sí, confirmó una semana más las ausencias por lesión tanto de Óliver Torres como de Lucas Ocampos. El 2-1 de la pasada temporada supone un borrón en las fiables estadísticas de los hispalenses ante los franjiverdes. De hecho, solo han sumado esa derrota en sus seis últimas visitas al Martínez Valero en Primera, así como en los 12 últimos encuentros ante este rival en la máxima categoría.
El colegiado encargado de dirigir el choque será el manchego -pero inscrito al colegio madrileño- Valentín Pizarro Gómez. Un árbitro que afronta su tercera campaña en Primera y que dirigirá su quinto duelo a los sevillistas. Curiosamente, acumula con los de Nervión un balance de dos victorias, un empate y una sola derrota, la de los nervionenses la pasada campaña en el Martínez Valero. El castellano-leonés José Luis González González estará en el VAR.