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El Sevilla FC retoma esta noche la competición continental y lo hace en casa del vigente subcampeón de la Bundesliga, un VfL Wolfsburg que vive su tercera experiencia histórica en la Champions League. La igualadísima primera jornada del grupo G, con empates en Nervión y en Lille, hace que los cuatro equipos lleguen a esta segunda fecha igualados prácticamente a todo, lo que convierte a la doble cita de este miércoles en partidos todavía más decisivos si cabe. El Wolfsburg Arena acoge su primer partido de Champions en seis temporadas, cuando rozaron el acceso a las semifinales ante el Real Madrid ganando por 2-0, aunque en la vuelta sucumbieron en el Bernabéu por 3-0.
Julen Lopetegui llegó a Alemania sin el sancionado En-Nesyri, mientras que recupera a Óliver Torres e introduce como novedad en ataque al delantero Iván Romero. El vasco alabó el nivel de los alemanes, vigentes subcampeones de la Bundesliga e invictos esta temporada hasta el pasado sábado, cuando fueron derrotados por el Hoffenheim. Su homólogo en el Wolfsburgo, el neerlandés Mark Van Bommel, declaró por su parte que el favoritismo y la presión son para el Sevilla, acostumbrado a jugar el torneo en los últimos años y ganador de varios títulos europeos. En el bando de los lobos, se pierden la cita en la zona defensiva el lesionado Otavio y el sancionado Brooks, mientras que no están inscritos por lesión Schlager, William y Białek.
El lesionado Otavio y el sancionado Brooks se pierden la cita en los alemanes
No habrá lleno en el coqueto Wolfsburg Arena por las restricciones de público en Alemania, que limitan a un máximo del 50% del aforo siempre que no se superen los 25.000 espectadores, cifra aproximada de aficionados que podría albergar dicho recinto en condiciones normales en competición europea. Se espera que sean algo más de 12.000 aficionados, todos ellos con test covid o pasaporte de vacunación y ocupando la grada en forma de tablero de ajedrez, los apoyen a su equipo esta noche en el estadio. Aproximadamente medio centenar de sevillistas se dejarán notar de igual forma.
El búlgaro Georgi Kabakov, de solo 35 años, será el encargado de dirigir un partido en el que se estrenará frente a ambos equipos. De hecho será su noveno encuentro en la UEFA Champions League y el cuarto en la fase de grupos. Eso sí, cuenta ya con un bagaje de 60 duelos de competición europea desde que en 2013 recibiera la escarapela de la FIFA que le designa como colegiado internacional.