Entre los jardines de San Telmo y la Venta de Eritaña, donde se realizaba anualmente la Exposición de Ganados Selectos, se situaba el terreno conocido como el Huerto de la Mariana en el lugar que hoy ocupa la plaza de América.
En el otoño de 1905, la directiva del Sevilla FC solicitó estos terrenos al Ayuntamiento para la práctica de las actividades deportivas de la Sociedad.
Se cuenta que el campo no era malo, pero tenía el inconveniente que dentro del terreno de juego había un árbol de grandes dimensiones que algunas veces entorpecía el juego, pero que en otras servía para realizar estupendas paredes entre los jugadores.
El Sevilla FC jugó en este campo hasta el otoño de 1908, cuando los terrenos fueron ocupados por el Real Tennis Club, trasladándose el football hacia otros espacios más cercanos al Prado de San Sebastián.